Las corbetas Manabí y Loja son repotenciadas en la planta céntrica de Guayaquil. Foto: Mario Faustos/El Comercio
Astilleros Navales Ecuatorianos (Astinave) proyecta alcanzar este 2018 USD 2,3 millones en excedentes con la ejecución de cinco proyectos. Los directivos de la firma estatal toman distancia del grupo de empresas públicas consideradas ineficientes.
Tras el anuncio de optimización del Estado, Astinave pasará a estar adscrita al Ministerio de Defensa, aunque ahora el Ministro de esta Cartera ya preside el Directorio.
El gerente de Astinave, Camilo Delgado, señaló que del 2012 al 2017 la empresa registró USD 11,24 millones en excedentes, de los cuales USD 10,15 millones pasaron a las arcas del Estado.
“Astinave en toda su historia nunca ha perdido, nunca hemos pedido plata al Estado, más bien dejamos divisas para el país”, indicó. Las cifras reflejan que entre 2012 y 2014 los excedentes sobrepasaron el millón de dólares, pero en 2015 y 2016 disminuyó a poco más de medio millón entre los dos años.
La utilidad cayó en el marco de la recesión que atravesó el país porque su principal cliente, el Ministerio de Defensa, tuvo problemas de flujo de caja, según Vladimir Ibarra, gerente de Proyectos.
El 2017 arrojó resultados por un millón de dólares. La construcción de dos buques guardacostas a la Armada del Ecuador, cuyo costo fue de USD 34 millones, y de dos lanchas 1 606 para el canal de Panamá marcó el saldo positivo.
En la historia de 116 años el Astillero ha construido 130 buques, solo desde el 2010 se contabilizan 30. Los más grandes son los buques guardacostas 5009 que tienen una eslora de 50 metros, una manga de 9 metros y un calado de 2 metros. Pero también ha construido dragas, gabarras, remolcadores, yates para turismo. La única embarcación que no han hecho aún es un pesquero.
Justamente la construcción de navíos encabeza la línea de negocios. Otros campos de trabajo son el mantenimiento de embarcaciones, soluciones electrónicas y para actividad costa afuera e industrial.
Como parte del servicio de mantenimiento atiende a unos 60 buques anuales. Pero según Delgado, hay la aspiración de aumentar la capacidad instalada con una nueva planta en el puerto de Posorja para atender a los buques de un mayor calado y que se ven impedidos de ingresar al río Guayas.
Pero este es un tema pendiente. Desde el 2014 se había anunciado la creación de la nueva planta. Ibarra reconoció que este punto no se ejecutará hasta que exista un proyecto de la Armada Nacional para la fabricación de naves.
“La construcción de la planta de Posorja se justifica en el componente constructor de buques con el proyecto de la Armada, mientras no esté en marcha no se justifica”. Astinave actualmente dispone de dos talleres en el centrosur y sur de Guayaquil.
En el del centrosur se repotencia a las corbetas misileras Manabí y Loja de la Armada Nacional, que serán entregadas en noviembre próximo. Días atrás ya se entregó la denominada Los Ríos, la cual participó en las maniobras Unitas que se desarrollaron en Colombia.
Las embarcaciones se destacan a un costado del río Guayas. Los tres navíos son parte del proyecto de repotenciación que les dará una nueva vida de utilidad por 15 años.
Otros tres proyectos de Astinave también son con el Estado: la recuperación de Las Esclusas que unirán el río Guayas y el estero Salado, la construcción de dos muelles en el malecón Simón Bolívar de Guayaquil y el monitoreo y rastreo satelital de la flota de vehículos y de las embarcaciones.
De acuerdo con información de Astinave, hasta agosto de este año los ingresos operacionales alcanzaron los USD 47 millones y se prevé que lleguen a USD 64 millones hasta fin de este año. Así, se proyecta que las utilidades de la empresa sumen USD 2,3 millones.
Según datos de la Empresa Coordinadora de Empresas Públicas (EMCO), de enero a julio del 2018 Astinave tuvo resultados negativos por un millón de dólares.
Ibarra que ese resultado va a variar porque hay proyectos que se van a facturar en noviembre próximo. Dentro de la actividad portuaria costa afuera e industrial se está ejecutando un quinto proyecto para la firma pública Petroamazonas.
Este involucra un tendido de líneas submarinas para unir las plataformas Amistad y la 12, en el Golfo de Guayaquil, que están a cargo de la empresa pública petrolera.
Según Delgado, por esa cañería “va a correr 10 millones cúbicos de gas”.
El proyecto está previsto que sea entregado en la última semana de octubre.
Astinave, creada en 1972,tenía 614 trabajadores en nómina el año pasado. En el 2016 fueron 676, según su página web.