El Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) abrió la convocatoria de contratación de los estudios, que servirán para la construcción de la variante definitiva del tramo San Luis – Reventador, en el sector de Piedra Fina, en Napo, vía E45. Esta carretera, conocida también como Quito – Algo Agrio, conecta las provincias de Napo y Sucumbíos.
El proceso de contratación empezó el viernes 24 de marzo del 2023 y el plazo máximo para presentar las ofertas es el lunes 27 de marzo, a las 14:00. Las mismas serán calificadas un día después e inmediatamente adjudicada la ganadora.
Se conoce que la variante vial tendrá una longitud de 8,9 kilómetros, para la cual se ha destinado USD 25 millones, en total.
El presupuesto referencial para los estudios es de USD 608 048, sin incluir el impuesto al valor agregado (IVA). El plazo para la ejecución será de 45 días, contados a partir de la suscripción del contrato. Es decir, la fecha máxima de entrega será e 15 de mayo de este año.
La invitación para que presenten sus propuestas es para consultores nacionales, organismos facultados para ejercer la consultoría, asociaciones o consorcios, entre otros, que se encuentren habilitados en el Registro Único de Proveedores.
Mientras avanza el proceso de contratación de estudios y construcción de esta variante, el MTOP continúa con los trabajos para habilitar un paso provisional de 2,2 kilómetros, para la conectividad en la zona.
Decreto presidencial para construcción de obra
El proceso de contratación de los estudios se inicia luego de que el presidente Guillermo Lasso incluyera la emergencia vial de E45 en el Decreto 693, del 20 de marzo del 2023. El documento fue suscrito para solventar los efectos de la época invernal, que ha afectado varias provincias del país, y del sismo de 6,5 grados de magnitud, registrado en la provincia de El Oro, el pasado 18 de marzo.
Sin embargo, varios pobladores de la zona se han preguntado por qué se demoró tanto el inicio de esta obra, ya que el tramo de la vía colapsó en diciembre del 2021, por efectos de la erosión regresiva del río Coca y sus afluentes.
El ministro de Obras Públicas, Darío Herrera, señaló que la contratación de esta obra no era tan fácil, ya que el 83% del trazado de la variante atraviesa por el Parque Nacional Cayambe – Coca, y se necesitaba permisos especiales, ya que la Constitución prohíbe intervenciones en esta zona.
El colapso de la vía dejó miles de pobladores de Napo y Sucumbíos incomunicados por más de 15 meses, causando perjuicios económicos y sociales incalculables.
Este no es único problema que ha dejado el proceso erosivo del río Coca y sus afluentes. Hay que recordar, que este fenómeno natural se inició en febrero del 2020, tras el colapso de la cascada San Rafael, entre Napo y Sucumbíos.
Y en tres años, ha destruido viviendas, puentes, oleoductos e incluso están en peligro las obras de captación de la Central Hidroeléctrica Coca Codo Sinclair. Las pérdidas para todos son incuantificables.
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