La Autoridad Portuaria de Guayaquil (APG) destinará USD 500 000 para cancelar las indemnizaciones a 30 empleados que fueron despedidos el martes pasado.
Así lo anunció ayer Rubén Morán, presidente del Directorio de la APG, quien añadió que no se tiene previsto llenar las vacantes. “Se está ejecutando un proceso de reestructuración, lo que implica reducir considerablemente el personal de la institución”, manifestó.
La APG contaba con 62 empleados, pero desde el martes pasado solo quedan 32.
Para Morán, la reducción de personal no generará problemas en la administración, debido a que la empresa tiene más personal del necesario.
“El puerto está concesionado a un operador privado y dejó de realizar múltiples actividades operativas, por lo que el personal debe reducirse”, explicó.
Uno de los despedidos fue Jorge Jiménez, quien laboraba en la Unidad de Control de Gestión. Él estaba encargado de la seguridad industrial y ambiental del puerto.
En 10 años, Jiménez ha sido separado de sus funciones dos veces. La primera vez fue en junio del 2009, pero luego de una disputa legal fue reincorporado en noviembre del 2010.
Pero el martes, a las 10:00, recibió la notificación de que sus labores terminaban. “No sé por qué me botan. Tengo mi hoja de vida intachable pero de nada me sirvió. Ni siquiera sé con cuánto me van a liquidar”.
La APG alista otra fase de despidos para lo cual se suprimirán otros puestos. Según Morán, una vez que ya no haya exceso de personal no se realizarán más contrataciones de personal.
Sin embargo, Jiménez contó que ya se han contratado empleados para reemplazar a quienes fueron separados.