La empresa Lafarge Cementos, cuya planta funciona en Otavalo, Imbabura, duplicó su capacidad de producción. Así lo aseguró Charles Law, gerente general de la planta.
De esta manera la industria que producía 800 000 toneladas de cemento el año pasado, ahora puede fabricar 1,6 millones.
No hay duda que la instalación de una nueva línea de planta, cuya implementación se inició en enero del 2008, incrementó la capacidad del molino de cemento.
Esos trabajos demandaron una inversión de USD 120 millones. Sin embargo, ahora se ven los resultados, asegura Law. Efectivamente, desde inicios de este año se duplicó la capacidad de producción de clinker (materia prima para producir cemento), hasta alcanzar un récord histórico.
De esta manera, la firma francesa Lafarge, que en diciembre del 2004 adquirió la empresa Cementos Selva Alegre, continúa su plan de expansión, el cual busca cubrir la creciente demanda del producto en el país.
Law asegura que megaproyectos que lleva adelante el Régimen como la construcción de los puentes sobre el río Esmeraldas y la rehabilitación vial en el país, por ejemplo, han aumentado la demanda de cemento.
Según cifras del Instituto Ecuatoriano del Cemento y el Concreto, mientras que en el 2008 Ecuador consumió 4,99 millones de toneladas de cemento, en el 2009 aumentó a 5,30 millones.
Lafarge anunció que continuará su programa de crecimiento. Y, dentro de esta proyección, la seguridad industrial se ha transformado en el principal eje de trabajo. Con el programa denominado cero accidentes se capacita al personal y a los contratistas que prestan sus servicios.
Lafarge es una de las cuatro empresas que fabrican cemento en el país, de las cuales dos están en manos privadas. La otra es Holcim Ecuador, filial de la firma Suiza Holcim, que posee dos plantas en Guayaquil y Latacunga.
Mientras que en Industrias Guapán, de Azogues, y Cementos Chimborazo, de Riobamba, el Estado tiene participación.