Daniel Santelices y su socio abrieron el emprendimiento Grill Twins. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO.
La falta de puestos de trabajo ha llevado, cada vez, a que más personas ofrezcan servicios o generen emprendimientos, incluso ajenos a su experiencia y formación, con el fin de obtener ingresos.
Ese fue el caso del arquitecto Jorge Moreno. Hasta hace siete meses se dedicaba a la construcción, pero perdió todos sus clientes debido a la compleja coyuntura económica.
Junto con su esposa puso un ‘food truck’, en el parqueadero del Centro Comercial Iñaquito (CCI), en el que vende bolones, corviches y otros productos. Invirtió USD 32 000, con la liquidación de su última obra y una deuda que adquirió para completar el total.
Moreno optó por desarrollar un negocio familiar, porque el sector de la construcción redujo considerablemente su actividad económica en el último año y el empleo es escaso.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), a junio del 2015, del total de trabajadores con empleo adecuado, un 9,8% era de la construcción. Para junio de este año, esa cifra cayó al 7,7%.
Rellenitas & Yapadas, el negocio de Moreno, funciona desde marzo y se ha promocionado en redes sociales. También apareció en medios, lo cual -dice- le ha ayudado.
Jorge Moreno en su ‘food truck’, donde vende antojos costeños. Foto: Paúl Rivas/ EL COMERCIO.
Estas no son las únicas vías para ofrecer servicios, también están los anuncios en plataformas de Internet.
Marco Grauso, creador del perfil de Facebook Leaving Quito Stuff, explica que hace tres años, cuando se creó, la gente solo ofertaba bienes. Pero hace año y medio comenzaron a anunciar servicios, como transporte, limpieza, turismo, alimentación, etc. Y ahora, el 20% de sus publicaciones está en esta categoría.
Los resultados del portal OLX también son un ejemplo. Rafael Portilla, country manager de la firma en Ecuador, detalla que la oferta de servicios creció 23% en el segundo trimestre de este año, frente al mismo período del 2015. De igual modo, el número de personas que buscan servicios y que respondieron a estos anuncios subió 113% en ese mismo lapso.
Los datos de OLX también muestran que durante el segundo trimestre de este año había 74 225 anuncios de servicios y 22 391 ofertas de trabajo. En el 2015, en el mismo período, hubo 60 543 y 21 194, respectivamente.
Entre los anunciantes de servicios está Washington Toledo. Él tenía una ferretería en Chillogallo, pero hace dos meses quebró, así que la única opción, al tener licencia de conducción profesional, fue ofrecer sus servicios vía Internet. Sin embaargo, hasta el momento nadie lo ha contratado.
También buscó empleos regulares. “Entregué unas 20 hojas de vida, pero no sale nada”.
Para el country manager de OLX , el incremento de la oferta de servicios puede estar vinculado a que hubo profesionales que salieron del segmento formal, tal vez porque perdieron su trabajo y que ofertan sus servicios para tener ingresos.
Por otro lado, dice Portilla, hubo empresas y personas naturales que, buscando aumentar sus oportunidades de venta y enfrentar la desaceleración económica, acudieron a canales alternativos para conseguir empleo o anunciar sus servicios profesionales.
El empresario comenta que entre quienes ofrecen servicios hay personas que pueden estar subempleadas y, además, enfrentar condiciones de informalidad.
El INEC, en respuesta a este Diario, por teléfono y correo electrónico, informó que las personas que realizan trabajo independiente pueden estar en diversas categorías de labor, dependiendo de tres factores: horas, ingresos y deseo de trabajar más tiempo. “Si gana más de un salario básico (USD 366) y trabaja las 40 horas semanales es empleo adecuado, pero si esa misma persona no cumple alguna de estas dos condiciones está en empleo inadecuado”, explica la entidad.
Esta última categoría aglutina al subempleo, otro empleo inadecuado y empleo no remunerado. El subempleo subió de 13,2% al 16,3% entre junio del 2015 e igual mes de este año, según la institución.
Los dueños de negocios que ofrecen diferentes servicios explicaron que no todos los meses ganan lo mismo. Daniel Santelices, quien emigró a EE.UU. a trabajar y volvió el año pasado, pero no halló trabajo en el país, abrió un local de comidas rápidas en el norte de Quito junto a un socio.
En Ecuador, el número de emprendimientos por necesidad creció del 5,9% al 10,3% entre el 2005 y el 2015, según Global Entrepreneurship Monitor, una encuesta que mide los niveles de emprendimiento en los países.