La Justicia chilena confirmó ayer tres condenas de hasta 10 años de cárcel, por el homicidio del coronel de Ejército Gerardo Huber, ocurrido en enero de 1992, durante las revelaciones del tráfico ilegal de armas hacia Croacia.
La Corte de Apelaciones confirmó las condenas de primera instancia, por “asociación ilícita para homicidio”, contra el subdirector de Inteligencia del Ejército, general (r) Víctor Lizárraga, a 10 años de cárcel, y, del brigadier (r) y jefe del Batallón de Inteligencia, Manuel Provis (4 años). El capitán Julio Muñoz fue sentenciado a 60 días, como encubridor de homicidio calificado. Fue absuelto del cargo de asociación ilícita.
Al mismo tiempo, el tribunal revocó las condenas por asociación ilícita contra el jefe de Logística del Ejército, general (r) Carlos Krumm, y el coronel Eugenio Covarrubias. Además anuló la indemnización por 800 000 dólares para la viuda e hijos de Huber, que estableció en octubre del 2009 el juez Claudio Pavéz, a cargo de la investigación.
Esta última decisión será apelada por los querellantes.