Un impuesto al uso del suelo que hacen los clientes bancarios, en las filas frente a los cajeros automáticos, es la propuesta del Intendente de La Plata para recaudar fondos en su municipio. Foto: Infobae
La medida la impulsa el intendente Julio Garro, de Cambiemos. Le aplicarán una tasa a los bancos por el uso del espacio público y a los que compren vehículos. “Todo esto es justo”, dijo un funcionario platense.
El afán de recaudar de los contribuyentes llegó esta vez a un límite insólito. El Municipio de La Plata intenta poner en marcha dos impuestos que ya generaron polémica: uno para las filas de las sucursales bancarias y otro para el uso del asfalto.
El proyecto, enviado por el intendente Julio Garro, de Cambiemos, la coalición de gobierno de la Provincia y de la Nación, apunta a que se cobren impuestos por el uso del espacio público que muchas veces obstruye el paso de los peatones. El problema que desató esta iniciativa es que tal aumento sobre los bancos podría recaer en los bolsillos de los clientes.
Además, la propuesta promueve un incremento promedio de las tasas de servicios del 30% y, en algunos casos, del 50%. A su vez, a los compradores de autos (0 KM o usados) se les quiere cobrar la “Tasa de Asfalto”, de un 0,5% del total de la transacción.
Los motoqueros no quedarán al margen de los aumentos. La iniciativa pretende que los mismos paguen por valuación fiscal y no por cilindrada, lo que llevaría que pasen a pagar de tres a cinco cuotas.
Entre otras cosas, el intendente busca aumentar la alícuota que se abona por los espectáculos en el Estadio Único de La Plata, que pasaría a ser del 1% al 1,5%.
“Las filas que forman en la vereda justifican el cobro de una tasa tributaria”, argumentaron desde el municipio, donde detallaron que sería de $30 mil (USD 1 995) anuales por cada cajero instalado en la vía pública.
Horacio Prada, director de la Agencia de Recaudación platense, intentó esta mañana justificar la medida impulsada por el intendente Garro. “Es para darle un mejor servicio a la gente”, afirmó el funcionario en una entrevista con Luis Novaresio, en radio La Red. Y al ser consultado sobre si ambas imposiciones eran “justas y razonables”, no dudó: “Sí, por supuesto”.
Según Prada, la tasa que le cobrará a los bancos por las filas en las sucursales se justifica en “el uso del espacio público y la seguridad extra que requiere de parte del Municipio esa actividad”, mientras que la tasa a la “utilización del asfalto” financiará “la señalética y el bacheo” de la ciudad capital de la provincia.