El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pidió hoy, 14 de marzo, calma al gobierno de Estados Unidos ante las protestas que estremecen al país desde hace un mes y lo acusó de haber asumido el liderazgo de un intento de “derrocamiento” del gobierno de Venezuela.
Asimismo Maduro advirtió que si el gobierno y la revolución bolivariana fuera desestabilizada “vendría el peor periodo de inestabilidad política y económica” en América Latina y El Caribe”. “Hago un llamado al gobierno de Estados Unidos a que coja mínimo (haga una pausa), están llevando al presidente (Barack) Obama a un abismo y se van estrellar contra Venezuela y va a terminar de aislarse en toda América Latina y El Caribe”, dijo Maduro durante una rueda de prensa en el Palacio de Miraflores en Caracas.
El mandatario denunció que en los últimos días “ha habido lobby como no se veía no se desde cuanto tiempo del gobierno de Estados Unidos”. “Lo que ha sucedido ha desnudado la naturaleza real de la política del Departamento de Estado de Estados Unidos. Hoy es evidente el intervencionismo desesperado del Gobierno de Estados Unidos” , dijo Maduro.
Asimismo denunció que Joe Biden, vicepresidente de Estados Unidos, “quería hacer lana y salió trasquilado, queriendo hacer lobby en la investidura de Michelle Bachelet” en Chile.
“El continente salió como uno solo a decirle Venezuela se respeta”, acotó.
Maduro afirmó que “desestabilizar y destruir la democracia en Venezuela tendría consecuencias imposibles de aguantar para la sociedad estadounidense”.
“El gobierno de presidente Obama no puede dejar llevar su política exterior por presiones extremistas de un lobby mayamero”, dijo Maduro.
El jefe de estado aseguró que “todos los casos de personas fallecidas” durante las manifestaciones son imputados a las acciones “guarimberas” (barricadas)” que se ejecutan en algunas vías principales del país.
Venezuela lleva más de un mes de protestas antigubernamentales que causaron 28 muertos, centenares de heridos, más de 120 periodistas agredidos en la coberturas de sucesos y al menos 44 casos de tortura reconocidos por las autoridades.