La liberación de 2 rehenes se afina

La lucha de un padre en Colombia. El profesor Gustavo Moncayo (en el centro, con bastón y sombrero en la mano) ha recorrido 900 km desde el 2007, para protestar por el secuestro de su hijo Pablo Emilio.

Las últimas 48 horas han sido decisivas en la recta final del proceso de liberación del cabo Pablo Emilio Moncayo, quien fue secuestrado hace más de 12 años por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
La mañana de ayer, en la Casa de Nariño, el Gobierno colombiano mantuvo una reunión con el profesor Gustavo Moncayo, padre del cautivo más antiguo de la guerrilla, para pulir los últimos detalles del operativo.
A través del comisionado de Paz colombiano, Frank Pearl, el presidente Álvaro Uribe se comprometió con el profesor Moncayo a brindar todas las garantías para que este fin de semana se inicien las acciones de rescate, sin que se ponga en riesgo la vida de su hijo.
El comisionado Pearl explicó los detalles del operativo, en el que participarán el Gobierno brasileño, la Cruz Roja Internacional, la Iglesia Católica y la senadora liberal Piedad Córdoba.
Según la planificación, primero se recogerá al soldado Josué Daniel Calvo, quien está en poder de la insurgencia desde abril del 2009 y cuyo estado de salud es delicado. Tras ese rescate, habrá una pausa de 24 horas para que las FARC entreguen a la misión humanitaria al cabo Moncayo, así como los restos del mayor de policía Julián Ernesto Guevara, quien murió en cautiverio en el 2006.
De acuerdo con Pearl, el Gobierno estima que antes del lunes empiece el operativo para poner punto final a los más de 12 años de cautiverio del cabo Moncayo.
Luego de la reunión, el profesor Moncayo subrayó que si bien el Gobierno reiteró las garantías para que el operativo se ejecute, anticipó que espera que las Fuerzas Armadas respeten su compromiso de suspender sus operaciones militares cuando se conozcan las coordenadas del sitio de entrega.
Según el protocolo, el Ministerio de Defensa no realizará ninguna acción contra la guerrilla durante un lapso de 36 horas.
Los detalles logísticos del proceso de liberación también han avanzado en las últimas horas. Los helicópteros brasileños y su tripulación que participarán en la operación ya están en la frontera entre Colombia y Ecuador. Ellos solo esperan que arranque el operativo y que la senadora Córdoba entregue las coordenadas del sitio en que se realizarán las dos liberaciones.
La semana anterior, las FARC entregaron a Córdoba las coordenadas geográficas. En forma paralela, los militares colombianos ya habilitaron tres terminales aéreas para el proceso. Se trata de los aeropuertos de San José del Guaviare, Florencia (departamento del Caquetá) y Vanguardia, en la ciudad de Villavicencio.