México y Honduras se sumaron a la condena que expresaron organizaciones de Derechos Humanos y de Inmigrantes de Estados Unidos a la Ley que criminaliza a los migrantes indocumentados promulgada el viernes pasado por el estado de Arizona.
“El gobierno de México condena la aprobación de la ley, Aplicación de la Ley y Vecindarios Seguros’ (SB1070) del Estado de Arizona, firmada el 23 de abril, por la gobernadora Janice K. Brewer”, dijo la Presidencia en un comunicado.La criminalización del fenómeno migratorio, lejos de contribuir a la cooperación y colaboración entre México y el estado de Arizona, “representa un obstáculo para la solución de los problemas comunes en la región fronteriza y en América del Norte en su conjunto”, agregó.
La ley convierte en delito residir en el estado sin documentos y permite a la Policía interrogar y detener a cualquier persona en base a “sospechas razonables” de que sea inmigrante ilegal.
Cerca de 400 000 inmigrantes viven de manera ilegal en el estado de Arizona, cuya frontera con el estado mexicano de Sonora se convirtió desde 1993 en el paso con mayor flujo de indocumentados. Esto, después que Estados Unidos reforzó las operaciones en California, Texas y Nuevo México, que forzaron a los migrantes a cruzar la frontera por el desierto.
El canciller hondureño, Mario Canahuati, aseguró que en Estados Unidos “están abusando” al criminalizar a los inmigrantes indocumentados.
“Nos están pisoteando, están abusando de nuestra gente, esto último nos cuesta entenderlo”, afirmó el canciller en el aeropuerto de Tegucigalpa, antes de viajar a Estados Unidos junto al presidente Porfirio Lobo.
En Estados Unidos reside más de un millón de hondureños, y de ellos más del 60% están de forma irregular. Canahuati viajó a Estados Unidos para gestionar la ampliación del Status de Protección Temporal (TPS), que concede permiso de trabajo a inmigrantes pero vence el 5 de julio.
El programa fue otorgado en 1998, después del paso del huracán Mitch, y protege a unos 75000 hondureños que pueden residir en Estados Unidos sin riesgo a ser deportados.