El Gobierno sirio condenó hoy 14 de diciembre del 2017 “rotundamente” el bombardeo de ayer de la coalición internacional liderada por EE.UU. contra una localidad de la provincia nororiental siria de Deir al Zur, donde al menos 23 civiles fallecieron.
Así lo expresó el Ministerio sirio de Exteriores en dos cartas enviadas a la Secretaría General y el Consejo de Seguridad de la ONU, según la agencia de noticia oficial SANA.
En las misivas, el ministerio llamó la atención al hecho de que la coalición perpetrara “este crimen atroz” coincidiendo con “la eliminación de la organización terrorista Dáesh (acrónimo en árabe de Estado Islámico) por parte del Ejército Árabe Sirio y sus aliados”.
Para el ministerio, “el objetivo es crear la ilusión de que los aviones de la coalición luchan contra la organización terrorista, mientras que lo cierto es que trasladan a los terroristas hacia posiciones seguras y garantizan su protección“.
En sus cartas, el Gobierno de Damasco también condenó “categóricamente” la falta de respeto que, a su juicio, muestran algunas partes que afirman que están preocupadas por la soberanía y los derechos humanos.
Anoche, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó de la muerte de 23 civiles por un supuesto bombardeo de la coalición internacional contra la población de Yaradi, en el este de la provincia de Deir al Zur.
El lunes, el presidente ruso, Vladimir Putin, proclamó la derrota del grupo terrorista Estado Islámico (EI) en Siria y anunció el inicio de la retirada de las tropas rusas del país árabe.
Sin embargo, el portavoz de la coalición, el coronel Ryan Dillon, advirtió ayer en su cuenta de Twitter de que, aunque el EI está débil, todavía es una amenaza y que acecha en áreas del valle del Éufrates en Siria.
De acuerdo a datos del Observatorio, todavía hay presencia del EI en el país árabe en las provincias de Deir al Zur y Homs, así como en Hama, el sur de Damasco y las regiones meridionales de Deraa y Al Quneitra.