Hay quienes creen que la Iglesia Católica no encontró la fórmula para enfrentarse a los retos que exige la sociedad moderna en cuanto al fortalecimiento de la fe.
Opiniones y percepciones aparte, lo que sí es concreto es el surgimiento y consolidación de nuevos cultos religiosos.
El Ecuador no se escapa de esa realidad. Cada vez es más frecuente escuchar que existen nuevas iglesias que reclutan personas en calidad de feligreses. ¿Por qué, al parecer, la Iglesia Católica pierde espacio?
Para el ex sacerdote Eduardo Delgado, quien perteneció a la comunidad salesiana, en la actualidad existe una crisis en todos los ámbitos de la sociedad. Eso ha provocado que el catolicismo pierda terreno debido a factores como la globalización, el incremento de cultos religiosos, entre otros.
“Su pretensión de universalidad la ha convertido en masiva, pero la gente busca ahora tener un nombre y un espacio. Hay otras religiones que han optado por hacer pequeñas comunidades”, asegura Delgado.
Este punto de vista difiere con el del monseñor Antonio Arregui, arzobispo de Guayaquil, quien considera que la fe católica está en crecimiento. Una prueba de aquello es que no existe la suficiente cantidad de iglesias para albergar a los fieles durante las misas.
Otro punto que para él demuestra el crecimiento de la Iglesia Católica en el Ecuador es la cantidad de aspirantes a sacerdotes que ingresaron al Seminario Mayor. Arregui informó que un total de 28 jóvenes se inscribieron este año. En la actualidad hay 89 seminaristas en Guayaquil.
Todo esto en un contexto problemático: los escándalos de pedofilia que merman la credibilidad de dicha religión.
Para Delgado esos problemas han influido de forma negativa en la imagen del catolicismo. Por su parte, el sacerdote Fernando Vega al ser consultado por la relación entre estos dos temas, dice: “Vivimos una doble moral, por un lado la sociedad defiende la homosexualidad, como lo vimos con la noticia del señor Ricky Martin; la gente le felicitaba. Y me parece que por un lado nos escandalizamos por unas actitudes y por otro lado aplaudimos otras”.
Pero el factor principal para que los devotos abandonen el catolicismo es de carácter existencial, según Vega.
“Por eso buscan nuevas sectas, para sentirse identificados. Antes la iglesia era monopólica. Ahora estamos en un mundo globalizado donde circulan las ofertas religiosas”.