Estados Unidos anunció hoy que estacionará en Japón otros dos destructores más del tipo Aegis, como respuesta a las recientes pruebas de misiles llevadas a cabo por Corea del Norte.
La noticia fue comunicada en Tokio por el secretario de Defensa norteamericano, Chuck Hagel, quien hoy se entrevistó con su homólogo japonés, Itsunori Onodera.
Ambos acordaron intensificar su alianza de seguridad, informan los medios locales. El traslado de los barcos de guerra, cuya cifra aumentará de cinco a siete, se hará hasta 2017 y el objetivo es poder hacer frente mejor a los lanzamientos “provocativos” de misiles por parte de Corea del Norte, se informó.
Ambos ministros criticaron lo que consideran intentos por cambiar el statu quo en la región mediante el uso de la fuerza, en alusión a la disputa con China por una serie de islas deshabitadas pero estratégicas.
Hagel, que viaja mañana a China, subrayó que Estados Unidos se toma “en serio” su alianza defensiva con Japón. “Es en interés de todas las naciones que se llegue a una solución pacífica de las disputas territoriales”, indicó.
“Las grandes potencias tienen grandes responsabilidades. Y China es una gran potencia”. El secretario de Defensa elogió además la propuesta del primer ministro japonés, Shinzo Abe, de darle a Japón derecho a la autodefensa colectiva, es decir combatir en conflictos del lado de sus aliados -en este caso Estados Unidos– aunque el propio Japón no sea atacado.
Abe quiere cambiar con esta interpretación la forma en que se entiende hasta ahora la Constitución pacifista de su país. Estados Unidos y Japón ampliarán además su cooperación en lo que respecta a la tecnología militar, tras el reciente anuncio por parte de Tokio de que flexibilizará sus directivas para la exportación de armas por primera vez en casi 50 años.
En medio de las tensiones con China, Tokio ya había anunciado un cambio de su política de seguridad. Así, las “fuerzas de autodefensa”, como se llama en Japón al Ejército, Fuerza Aérea y Marina, tendrán un papel más “proactivo” y se pondrá mayor énfasis en la alianza con Washington como contrapeso a la influencia china en la región.
Las conversaciones de Hagel en Tokio forman parte de los preparativos de la visita de Estado del presidente Barack Obama a Japón el 24 de abril.