Redacción Deportes
El policía militar de apellido Macías aguardaba instrucciones a través del radio. Junto a él esperaba una respuesta Christian Minda, amigo del volante Luis Antonio Valencia, quien lo citó ayer y que esperaba ingresar a la Esmil.
Las restricciones de ingreso al sitio en donde se entrena la Selección fueron extremas ayer. Las personas que llegaban debían identificarse e indicar a qué sector de la Esmil accederían.
“Solo se permite que pasen al estadio personas autorizadas por la Federación Ecuatoriana de Fútbol para casos específicos”, mencionó el uniformado.
Minda, quien llegó a las 10:00, debió esperar que el entrenamiento culmine para poder entrar y conversar con ‘Toño’ sobre un “asunto de negocios”.
La misma suerte no la tuvo un padre de familia que llegó con un pequeño niño de unos seis años. Tímidamente se acercó y preguntó al guardia si podían ver la práctica de los seleccionados, pero recibió una respuesta negativa. “Lo siento, pero es una orden que tenemos”, dijo el policía militar.
Otro de los jugadores que recibió una visita fue el defensor Geovanny Espinoza. Un familiar de él llegó en una camioneta negra marca Toyota con su pasaporte.
Con el documento en la mano, le indicó al guardia que el zaguero lo esperaba porque él le ayudó a renovarlo. Macías enseguida preguntó por radio si podía dejarlo pasar y la petición fue aceptada. El reloj marcaba las 10:45.
El lunes, la ‘Sombra’ pidió permiso para cumplir trámites personales durante la mañana, pero debió presentarse en la tarde. Él fue el único integrante de la Tri que recibió permiso para salir de la concentración.
Antes también pasó un vehículo con una publicidad que debía ser instalada para hoy. La Tricolor cambió de planes a último momento y decidió atender a la prensa desde las 09:00, según indicó ayer Víctor Mestanza, el jefe de prensa de la Ecuafútbol.
Mientras tanto, el plantel se entrenaba en lo físico y realizaba fútbol informal. Los únicos espectadores era un grupo de militares que uniformados observaban cada movimiento desde las gradas.
Coincidentemente, ayer también se realizaron las entrevistas para los aspirantes a oficiales. Se esperaba la presencia de 300 personas, por eso, la restricción al estadio fue determinante para evitar distracciones en la Tricolor.
“Hay militares que están controlando el ingreso al estadio”, aseguró Macías, mientras seguía exigiendo documentos el acceso.
Aparte de hoy, la Selección tendrá un nuevo contacto con los medios la tarde de mañana (15:00), cuando se tome la foto oficial.