Redacción Siete Días
Si la esencia de Internet es crear una superautopista de la información, la contra de esa esencia no es otra que la censura. Hace no más de dos meses, China bloqueó el acceso a una página de Internet creada por las autoridades berlinesas con motivo del vigésimo aniversario de la caída del Muro de Berlín.
Yahoo ayudó a la ‘cibercensura’
El periodista Shi Tao fue condenado a 10 años de cárcel por enviar un correo electrónico al extranjero en el que incluía las restricciones que el Gobierno de China iba a imponer a la prensa con motivo del 15 aniversario de la masacre de la plaza de Tiananmen, en Pekín, llevada a cabo por el Ejército en 1989.
La empresa Yahoo! ayudó a identificar al periodista a través de su dirección de e-mail. Amnistía Internacional ha pedido su liberación.
Para condenar estos atropellos, cada 12 de marzo se celebra el Día Mundial contra la Cibercensura, un día creado para reflexionar sobre la visión de una Internet libre, como una verdadera ventana abierta a todo el mundo.La página había sido creada para que los usuarios de la red social Twitter entraran en la página berlintwitterwall y plasmaran sus pensamientos sobre ese acontecimiento histórico y sus consecuencias en todo el mundo. Con excepción de los chinos, todos los usuarios del mundo tienen acceso a ese portal.
No es la primera vez que ese país ha censurado información de la Internet. Incluso, según el Wall Street Journal, el Gobierno chino obliga a los fabricantes de PC de ese país a vender sus equipos con un software preinstalado para impedir el acceso a determinados sitios. El programa Green Dam-Youth Escort bloquea el acceso a las páginas web prohibidas (como la del New York Times o la de la BBC) conectándose con una base de datos.
Y aunque el Gobierno de ese país intente justificar el bloqueo al acceso a determinadas páginas web extranjeras, asegurando que algunas de ellas han violado las leyes del país al promover la idea de que existen ‘dos Chinas’, cada vez es mayor el número de protestas en el planeta en contra de la ‘cibercensura’ en ese país.
Una de las organizaciones con mayor fuerza en este sentido es Reporteros sin Fronteras (RSF), la cual ha convocado a diversas manifestaciones virtuales para denunciar la censura en Internet. Un ejemplo de ellas fue la campaña 24 horas contra la censura, organizada el año pasado y que movilizó a 40 000 internautas.
Además, la organización invita constantemente a los internautas a trasladar a la red sus quejas, con la creación de avatares (personajes virtuales) que pongan de manifiesto su malestar con la falta de libertad de expresión.
Manifestaciones cibernéticas son organizadas por RSF. Una de ellas consiste en conectarse con un mapa del mundo sobre el cual hay que ‘pinchar’ en los países que no respetan la libertad de expresión y contabilizar después el número de personas que se han manifestado de ese modo.
Además de China, la lista de países que no respetan la libertad de expresión, elaborada por RSF, incluye a Arabia Saudita, Bielorrusia, Birmania, Corea del Norte, Cuba, Egipto, Etiopía, Irán, Uzbekistán, Siria, Túnez, Turkmenistán, Vietnam y Zimbabue.
Según la organización defensora de la libertad de prensa, en la actualidad hay 62 ciberdisidentes encarcelados en diferentes países y unos 2 600 sitios web, foros y blogs han sido cerrados.
Ante ello, junto con la organización de defensa de los derechos humanos Amnistía Internacional (AI), RSF exigió a Google, Yahoo! y Microsoft acabar con la censura en Internet en aquellos Estados, con el objetivo de lograr una auténtica red universal.
En una nota de la BBC, de Londres, Kate Allen, directora de AI en el Reino Unido, exige la liberación de quienes hayan sido encarcelados por expresar su oposición a través de Internet.
Como parte de la campaña permanente en contra de la ‘cibercensura’, AI creó un sitio web llamado irrepresible.info, donde ofrece ejemplos de censura e insta a los usuarios a incluir en sus propias páginas información prohibida en otras partes del mundo.