Magdalena Barreiro: ‘La focalización no ayudará a alcanzar la estabilidad fiscal’

Magdalena Barreiro, docente de la Universidad San Francisco de Quito y exministra de Finanzas. Foto: Archivo/ EL COMERCIO

Magdalena Barreiro, docente de la Universidad San Francisco de Quito y exministra de Finanzas. Foto: Archivo/ EL COMERCIO

Magdalena Barreiro, docente de la Universidad San Francisco de Quito y exministra de Finanzas. Foto: Archivo/ EL COMERCIO

Este Diario dialogó con Magdalena Barreiro, docente de la Universidad San Francisco de Quito y exministra de Finanzas, sobre las medidas económicas anunciadas por el Gobierno.

¿Cómo evalúa las medidas económicas que presentó el Gobierno?

La reforma para dotar de independencia al Banco Central es un punto muy importante para proteger la dolarización. Sobre lo tributario, es positivo eliminar el anticipo de impuesto a la renta y que se simplifiquen impuestos. La disminución del ISD también es bueno porque ese tributo termina siendo un impuesto a la entrada de capitales. Se han demorado demasiado en tomar esta medida, pero es positivo.

¿Qué opciones le quedan al Gobierno si no elimina subsidios?

Lamento que la eliminación del subsidio no se mantenga. Hay una necesidad fiscal absolutamente clara. Se necesita incrementar recursos para disminuir el déficit e ir rebajando la deuda. Una alternativa era subir el IVA, pero en la situación económica actual no era adecuado, por el impacto en el consumo y el crecimiento económico.

¿Qué alternativas de focalización existen?

La focalización es deseable, pero es difícil porque no va a ayudar al Gobierno a que recupere lo que necesita para alcanzar la estabilidad fiscal. Además, será difícil evitar que la gente que quiere hacer trampa se siga beneficiando del subsidio a los combustibles. Desde que fui ministra se discutían fórmulas de focalización y todas son muy complejas. Una más o menos simple sería a través del valor del vehículo, la matrícula y con una proyección aproximado de galones al año, hacer un cálculo para que estos consumidores paguen sin subsidio.

¿Qué pasará con el acuerdo con el FMI si no se logra el ajuste fiscal esperado?

El FMI está dispuesto a seguir ayudando al Gobierno. Mantenernos en la posición de que el FMI es ‘el diablo’ es algo político, mediocre y anticuado. El ente entiende más las restricciones políticas de los países y se puede dialogar, pero si no se puede llegar a un entendimiento se nos habrá cerrado una de las últimas fuentes de financiamiento baratas que tenía el país.

¿Qué otras alternativas de financiamiento podemos buscar?

No muchas. Ya se incrementó el costo de emitir deuda en bonos, por la incertidumbre en los mercados. Ahora nos tocaría emitir sobre el 10% de interés. Tenemos los multilaterales dentro del paquete de recursos aprobados con el acuerdo del FMI, y quizás si se acaba el acuerdo con el Fondo, también perderíamos esos recursos. Los chinos nos podrían prestar, pero con tasas altas, a menos que pongamos petróleo como preventa. El país debe tratar de salir de los colaterales (venta anticipada de crudo) porque nos reducen el crudo disponible para vender en spot.

¿El diálogo con los indígenas y las nuevas medidas mejoran la percepción del país en mercados internacionales?

Los mercados están representados por personas que siguen muy bien al país y saben lo que está pasando. Y es claro que nosotros, de ahora en adelante, vamos a estar expuestos a una política de chantaje, en la que todo aquel a quien no le guste una medida de Gobierno, aunque sea responsable, se puede oponer y hacer que se derogue. Eso acaba con la confianza en los mercados y genera una potencial inseguridad jurídica de normas en general.

¿Cuál es el escenario para el 2020?

La economía seguirá atada al tema político. Es un año electoral y complicado. Esperemos que el precio del crudo suba. El país debe seguir con el ajuste al gasto, es lo único que queda, ojalá no haya reclamo.

En lo productivo, ¿cuál será el impacto de la contribución que se ha planteado
para las empresas que facturan más de USD 1 millón?

Afectaría menos que el anticipo del impuesto a la renta. Lo malo es que el Gobierno planteó esto porque tuvo que ceder a un chantaje político. En todo caso, está bien que las empresas que más tienen contribuyan por un tiempo, porque también están recibiendo -por el otro lado- incentivos.

Formación. 
 Maestría en Finanzas y un doctorado en Finanzas en el Instituto Tecnológico de Illinois.

Carrera. Fue ministra de Finanzas en el 2005 es docente de las universidades San Francisco y Johns Hopkins.

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