Redacción Sociedad
Enma Ponce tiene 74 años y la risa fácil. Inquieta, espera en el segundo piso del Centro de la Experiencia del Adulto Mayor (CEAM), ubicado en el Centro de Quito, la llegada de su profesora de tejido. La mujer teje una chalina y espera acabarla en los próximos días para cubrirse de las frías mañanas quiteñas.
Mientras Ponce termina su obra y espera a su maestra Elena Sagal, en el primer piso, un grupo de adultos mayores mueve sus cuerpos al ritmo de una relajante música. Ellos pertenecen al grupo de gimnasia de la institución.
Cursos gratuitos
El CEAM está ubicado en las calles García Moreno y Loja, en el Centro de Quito. A este centro pueden ingresar adultos mayores, sin importar que sean jubilados.
También puede acercarse a Calderón, Tumbaco, Píllaro, Puembo y Checa.
La atención es gratuita. Puede recibir talleres de cocina, computación, gimnasia tradicional u oriental, arreglos florales, entre otros. Si desea comunicarse con el CEAM, puede llamar a los teléfonos 228 3448 o al 228 1420.En total, 12 400 son usuarios del centro, que funciona desde hace nueve años. Ponce ya ha participado en las ferias que los adultos mayores del CEAM organizan cada mes en la plaza Benalcázar, en el Centro de Quito. “Es muy bonito participar en la plaza Benalcázar, algunas personas se enamoran de las cosas que hacemos y hay algunas compañeras que logran vender sus artesanías”.
Ella comenta que el hecho de poder vender algunos tejidos es de gran apoyo para los adultos mayores, porque pueden ayudar económicamente en el hogar.
“La profesora nos guía, aunque pasen los años podemos seguir aprendiendo”, dice.
Estas personas de la tercera edad no dejan de mostrar su emoción cuando organizan sus ferias, se preparan todos los días para estas exposiciones en las que enseñarán todo el trabajo hecho. Allí muestran las manualidades realizadas en los diferentes talleres del CEAM y muchas veces tienen la suerte de que quienes las miran desean comprárselas. La última se realizó el pasado 28 de agosto y contó con la participación de un grupo de danza folclórica de los adultos mayores.
Por eso luego de varias reuniones mantenidas entre los líderes de los adultos mayores y el coordinador del CEAM, Vasco Núñez, se llegó a la conclusión de que, a pesar de los talleres que han tenido: panadería, computación, gimnasia, ellos buscan seminarios de manualidades que puedan convertirlos en microempresarios y de alguna forma tener un ingreso extra en el hogar.
Con el objetivo de incentivarlos y de proporcionarles mayores facilidades en los talleres que se imparten, el CEAM compró dos máquinas de coser para las manualidades, guitarras y una refrigeradora para el área gastronómica. En este proyecto invirtieron alrededor de USD 2 500.
Los adultos mayores estaban muy emocionados, enseguida utilizaron los nuevos implementos. Tocaban canciones, veían el manejo de la máquina de coser y otros preparaban la masa para el pan. Para la mayoría de integrantes del CEAM, participar en ferias es un incentivo, ya que les permite sentirse útiles en la sociedad y poder tener ingresos económicos para ayudar en su hogar.