La Gran Feria Turística se realizó el 7 de noviembre, en la Plataforma Financiera. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
El Gobierno busca bajar los costos internos para incentivar el turismo mediante tres medidas: paquetes turísticos a bajo costo, revisión de la tasa Ecodelta y la ampliación del subsidio al combustible para tres aeropuertos locales.
El 7 de noviembre del 2017, el Gobierno y el sector privado lanzaron -en el marco de la Gran Feria Turística- 13 paquetes con precios reducidos.
En este programa participan 1 500 agencias de viaje, 500 hoteles y tres aerolíneas. Las ofertas, que incluyen pasaje de avión o transporte terrestre, van desde USD 89.
La meta del Gobierno es alcanzar el 1×1 en turismo receptivo. Esto significa: lograr que por cada ciudadano que vive en el país llegue un visitante extranjero, o que el propio ecuatoriano se convierta en un turista, lo que permitiría convertir a esta actividad en el principal motor económico.
Pero no solo se busca alentar el turismo interno. El ministro de Turismo, Enrique Ponce León, anunció que está prevista una revisión de la tasa Ecodelta, un tributo que grava a los pasajes de vuelos internacionales, cuyo lugar de partida es Ecuador. Esta tasa se elevó de USD 20 a 50, en marzo del 2016 con el fin de invertir en promoción turística.
Para el funcionario “esta tasa no está cumpliendo con la naturaleza para la cual fue creada, es decir, la promoción turística nacional e internacional”.
Con ello, además, se busca atender uno de los problemas de conectividad del país: el alto costo de los boletos.
Para Marco Subía, director de la Asociación de Líneas Aéreas del Ecuador, en el país la operación es cara, por factores como el costo del combustible y el impuesto a la salida de divisas. “El costo de operación casi se duplica (respecto de otros países). Esto limita que vengan nuevas aerolíneas”.
Sin embargo, desde el 9 de noviembre, el costo del combustible bajó en los aeropuertos de Cuenca, Manta y Latacunga, debido a la inclusión de las tres terminales aéreas en un subsidio del 40% en el precio de venta del combustible, para aeronaves que utilicen los aeropuertos administrados por la Dirección General de Aviación Civil (DAC).
Los retrasos son otro inconveniente. Tres compañías brindan el servicio para el mercado interno: Tame, Aerolan (Latam) y Aerogal (Avianca).La estatal es la que registra mayores niveles de vuelos demorados y cancelados.
Entre enero y julio de este año, de 17 413 vuelos, el 12,8% presentó retrasos, según datos de la DAC. Algunos de los factores que ocasionan demoras y reprogramaciones, según el Ministro de Turismo, son la optimización de los recursos de las aerolíneas en las rutas que operan, principalmente por el flujo de pasajeros, condiciones técnicas y meteorológicas, así como la flota de aviones disponible.
Las autoridades de Tame aseguran que el tema operativo se está regularizando.
Avianca atribuye las demoras a condiciones climatológicas, factores externos y mantenimientos no programados.
La empresa colombiana afirma que solo el 0,99% de sus vuelos fue cancelado de enero a octubre. “En el caso de una cancelación, la aerolínea ofrece alternativas de embarque según disponibilidad en otras aerolíneas y/o reprograma el vuelo de los pasajeros afectados en otros de nuestros vuelos”.
El representante de la Cartera de Turismo reconoce que la reprogramación de vuelos modifica los itinerarios de los usuarios, previstos en un destino, reduciendo su tiempo de estadía. Sin embargo, recuerda que los usuarios tienen derecho a compensaciones.
La crisis llevó a Tame a suspender rutas no rentables y disminuir su flota a prácticamente la mitad (ocho aviones). Avianca y Latam, en cambio, han buscado incrementar su oferta de asientos.
El año anterior, Avianca renovó su flota por aeronaves más modernas y con mayor oferta de sillas. Hoy opera con nueve aviones Airbus. Latam, por su parte, sumará para diciembre un sexto avión A319, que le permitirá ampliar su oferta de asientos para las rutas Quito-Cuenca-Quito, en 70%, y para Guayaquil-Quito-Guayaquil, en 34%.
“Esto permitirá a nuestros clientes acceder a tarifas reducidas en itinerarios que se ajusten a sus necesidades de vuelo”, subrayó Manuel van Oordt, director ejecutivo de Latam Airlines Ecuador.
Pese a ello, según Ponce no se ha logrado suplir en un 100% el espacio dejado por Tame, porque el resto de aerolíneas tampoco cuenta con la cantidad de frecuencias necesarias. Para Subía, las frecuencias actuales son las adecuadas, de acuerdo con la demanda.