Los Ángeles. AFP
Un incendio forestal en California se propagaba con rapidez el lunes, obligando a 10 000 residentes a huir de las llamas, mientras amenaza una base de telecomunicaciones después de cobrarse la vida de dos bomberos.
El incendio está fuera de control en las montañas de los suburbios más poblados al noreste de Los Ángeles. Ha quemado 35 000 hectáreas de vegetación seca y se ha extendido en todas las direcciones, indicaron las autoridades.
Un ejército de más de 2 500 bomberos fue desplazado para luchar contra el siniestro en el Bosque Nacional de Los Ángeles, conocido como Estación Fuego, el cual ha podido ser contenido solamente en un 5%.
Las llamas se extendieron hacia Mount Wilson, donde amenazan una antena de comunicaciones que pertenece a varias cadenas de televisión, radio, proveedores de teléfonos celulares y numerosas agencias de las autoridades estadounidenses.
Hasta ahora, más de 10 000 personas han sido evacuadas por el fuego, que ha dejado dos bomberos muertos. Ellos se estrellaron en el camión que se dirigía por una zona de difícil acceso a uno de los focos del siniestro. Cuatro personas resultaron heridas.
Unas 18 casas fueron calcinadas por el fuego que amenaza más de 10 000 viviendas y unas
2 500 edificaciones, entre ellas 500 estructuras comerciales.
El gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, que ayer visitó otro incendio en el noreste de San Francisco, llamó a la población a obedecer las órdenes de evacuación de las autoridades, mientras los bomberos intentaban desde un helicóptero rescatar a cinco personas que estaban cercadas por las llamas. En esa zona, ellas no respetaron la orden de evacuación obligatoria.
“Muchas personas piensan que tienen que quedarse en sus casas para protegerlas, pero algunos lo pagan caro”, declaró el Gobernador. Uno de los focos del fuego aledaño a Los Ángeles estaba “ a unos 400 metros de Mount Wilson”, la mencionada base de telecomunicaciones, dijo una portavoz del Departamento de Bomberos y Protección Forestal e Incendio (el conocido Calfire) .
La pérdida de los servicios de comunicaciones en Mount Wilson podría paralizar las estaciones de Policía en todo el sur de California, que utilizan los transmisores que están en la cima de esa montaña para comunicarse.
“Se trata de una base de telecomunicaciones que es extremadamente crucial para la infraestructura y seguridad pública en la vida diaria de Los Angeles”, dijo el portavoz del Departamento Forestal, Mike Dietrich.
La mayoría de las 22 televisoras con sede en Los Ángeles transmite desde ese sitio, así como dos tercios de las radios FM de la región. El amanecer de ayer en Los Ángeles dejó al descubierto una espesa nube de humo, que se erigía en las montañas que están detrás de la colina en la que está el célebre letrero de Hollywood.
El valle de San Gabriel, al este de Los Ángeles, experimentó un récord de calor y baja humedad, con temperaturas que rondaron los 40 grados centígrados, indicó el Servicio Nacional de Meteorología, al agregar que la región continúa en alerta roja.
Uno de los factores claves en la expansión del fuego es que la mayoría de las zonas es riesgo está cubierta por una vegetación muy seca.
Estas zonas no han vivido un siniestro similar hace 40 años, lo cual las convierte en más vulnerables a las llamas.
California es azotada con frecuencia por incendios forestales debido a su clima seco, vientos y al crecimiento inmobiliario de los últimos años. Precisamente este desarrollo acelerado causó la construcción de zonas residenciales en áreas forestales, consideradas de alto riesgo.
En 2007 el sur del estado fue devastado por incendios forestales que figuraron como los peores en su historia y dejaron ocho personas muertas, 2 000 casas calcinadas, 640 000 desplazados y daños materiales por más de USD 1 000 millones.