Pamela Parra. Redactora
Ser elegida Reina de Quito es ser una embajadora de obra social. Así lo afirma María Francisca Paz y Miño, actual soberana de la capital.
A pesar de que el presidente de la República Rafael Correa ha expresado su inconformidad con los certámenes de belleza, Paz y Miño considera que este concurso va más allá de una cara bonita. Para ella, las candidatas que se postulan deben tener una vocación para ayudar a los demás.
El concurso
Mañana, la presidenta del Patronato Municipal San José, Andrea Nina Pereda de Barrera, realizará una rueda de prensa en la que se convocará a las inscripciones para el certamen.
Sofía Arteta, directora de la Fundación Reina de Quito, dijo sentirse agradecida con Nina por la inclusión en estos actos.Sin embargo, varios han sido los casos en que las participantes no han estado de acuerdo con las reinas electas. Uno de esos casos fue el certamen de 2005, en donde Gabriela Galárraga fue elegida reina de la ciudad.
Ella afirma que en muchas ocasiones las jóvenes no están preparadas para perder. Eso depende de su personalidad y la razón por la que entran al concurso.
Cuando Galárraga ganó se desencadenaron rumores sobre posibles irregularidades dentro del concurso. Las 13 señoritas emitieron un informe al Patronato San José e incluso la señorita Confraternidad, María Fernanda Dossman, estuvo próxima a renunciar a su designación.
En la carta se mencionaron aspectos con los que las chicas se sintieron inconformes. Uno de ellos fue el favoritismo. Carlos Guerrero, misólogo, asegura que estos problemas se presentan en Reina de Quito por la falta de preparación. Él dice las chicas deberían tener más tiempo para prepararse y sobre todo para conocerse. Además, según él, hay que destacar que este concurso se enfoca más en labor social.
Guerrero señala que sería importante que las chicas que se postulen tengan también un proyecto social. Pero también afirma que este tipo de inconvenientes siempre se han dado en los certámenes de belleza.
Sofía Arteta, ex reina y directora de la Fundación Reina de Quito, sostiene que esos rumores siempre van a presentarse. Pero dice que ninguno tiene fundamento. Ella señala que es imposible que una de las candidatas manipule el resultado. “Hay un jurado internacional al que ni tú ni tus padres pueden acercarse a ofrecerles dinero para ganar”.
Adicionalmente, Arteta destaca que con el período de Augusto Barrera, los proyectos del Patronato y los de la Fundación van a organizarse en conjunto. Para ella, eso es importante porque la Fundación, la Reina electa y el Patronato podrán interactuar y estar presentes en todo lo que tenga que ver con labor social. “Ese es el fin del certamen Reina de Quito”.