La exigencia de un adhesivo provocó manifestaciones de los motorizados en Santo Domingo de los Tsáchilas

En el centro de revisión vehicular de Santo Domingo se verifica el estado de las motos. Foto: Cortesía Municipio Santo Domingo.
La aplicación de un artículo de la ordenanza que regula la circulación de motos en Santo Domingo generó reclamos en este cantón del occidente del Ecuador.
Los grupos de motorizados realizaron un recorrido por las calles de esta urbe para pedir a la Empresa Municipal de Transporte que diera de baja a la exigencia del adhesivo “moto segura”.
Tras una reunión que los manifestantes mantuvieron con el alcalde, Wilson Erazo, esta disposición quedó suspendida.
Desde este 16 de junio del 2021 a los propietarios de motos no se les exigirá que cumplan con esta medida bajo pago, que contempla el artículo 6 de la normativa municipal, que está en vigencia desde noviembre del 2019.
El Municipio informó en horas de la tarde que quienes hicieron la revisión vehicular en otras ciudades pueden obtener el papel con la leyenda “moto segura” de forma gratuita y previo a la presentación de documentos habilitantes.
La ordenanza, que se aprobó en razón a los altos índices de inseguridad en el 2019, estableció entre otros aspectos que el documento, que debe estar visible en la parte frontal de la moto, debe ser solicitado con la revisión vehicular.
Un año y siete meses después, la Empresa de Transporte decidió aplicar este requisito que supone al usuario un pago de USD 20,90.
Antes de que se revea la ordenanza, las autoridades emitieron algunas aclaraciones que, sin embargo, hoy ya no tienen efecto.
El gerente de esta entidad, Héctor Fiallo, informó que quienes ya pasaron la revisión en meses anteriores no tendrán que volver a realizarla para obtener el adhesivo.
También señaló que los que hicieron este trámite en otros cantones debían de presentarse en la empresa local para sólo solicitar el documento. “Se les acepta la revisión de otros cantones, pero deben acercarse a gestionar el adhesivo”.
Para Paulo Morales, propietario de un restaurante que trabaja con grupos de delivery, esto afectaba las fuentes de trabajo de miles de familias.
Para este empresario, el problema no solo es el adhesivo, sino la exigencia de que se haga la revisión técnica en este cantón. “Los motorizados pueden ser susceptibles de ser sancionados en operativos por no tener este trámite con constancia en Santo Domingo”.
En el cantón se implementó la revisión técnica que implica el cumplimiento de una serie de parámetros mecánicos y de normativas ambientales para poder aprobar.
Esto provocó que los dueños de automotores buscaran opciones en cantones aledaños donde solo se realiza un chequeo visual.
Al respecto, la Empresa de Transporte informó que se flexibilizaron los parámetros a partir de los pedidos ciudadanos.
Por ejemplo, ahora se pone solo énfasis en el correcto frenado, suspensión, alineación de llantas y luces, entre otros.
En años anteriores hubo quejas porque no se podía pasar por ciertos problemas en el chasis o por exceder la norma ambiental por la emisión de gases. Esto último solo se podía medir con equipos especiales que no tenían talleres independientes a donde los usuarios iban a preparar sus carros, antes de la revisión vehicular.