Para Manuel Torres, los sembríos que tiene en San Juan, en la parroquia Picaihua, son su sustento. Junto a él, 19 agricultores más trabajan cultivando productos sin usar demasiados químicos.
Ellos integran la agrupación de Productores Agroecológicos y Comercio Asociativo de Tungurahua (Pacat). Esta organización cuenta con 510 socios que siembran, cosechan y venden en las ferias de la plaza Pachano, los sábados y en Huachi Chico, los domingos.
Aníbal Moreta, presidente de Pacat, cuenta que los cultivos están divididos por sectores. En la parte alta están los tubérculos, en el sector medio los cereales y en la zonas bajas, los frutales.
En el cantón Tisaleo, en dirección a Chilco La Esperanza, el paisaje se pinta de verde. Agricultores como Rosa Dolores Tenesaca tienen pequeños terrenos en los que producen para su consumo interno y para la venta, como un medio de sustento.
Tenesaca ofrece 25 quintales de papas a la semana. Una parte se queda en la casa y la otra se comercializa. Incluso, cuando no logran vender toda su producción en la plaza Pachano, acuden al Mercado Mayorista de Ambato para poder recuperar la inversión.
Los sábados, dice Moreta, la feria orgánica empieza a las 06:00 y se prolonga hasta las 13:00. “Garantizamos un producto limpio, con el 80% menos de uso de agroquímicos en su siembra”.
Los afiliados a Pacat están repartidos en los nueve cantones de la provincia. “El socio que menos tiene, produce en un solar de
1 750 metros cuadrados, pero también hay agricultores que cuentan con tres hectáreas de terreno”, comenta Moreta.
En la parroquia Santa Rosa, Francisco Pomaquiza labra a diario su tierra. Allí tiene en producción hortalizas, mellocos y habas. “Sembramos cada mes o cada 15 días para tener productos que se puedan comercializar todas las semanas. Vivimos de esto”.
El abono que utilizan lo preparan ellos mismos. “El biol es lo que utilizamos para sembrar. Para prepararlo se muele ají con ortiga, guanto, marco, ceniza… y eso se pone con un dosificador a los sembríos. La verdad es que las plantas no se dañan y dan buenos frutos”, cuenta Marcia Montenegro, dueña de un terreno en Tisaleo.
Walter Jácome, del Consejo Provincial de Tungurahua, explica que la agroecología forma parte de la estrategia agropecuaria de la provincia. “Se trabaja con nueve lineamientos, uno de ellos incluye el manejo de productos limpios”.
El proyecto se inició hace siete años cuando se empezó a trabajar en las zonas rurales. Dentro del plan se crearon granjas demostrativas. Una está en Píllaro y las otras dos en los parques de la Familia de Ambato y de Baños de Agua Santa.
Sin embargo, la consolidación de la provincia como zona agroecológica aún está en proceso.
El martes pasado, en Ambato, se desarrolló el primer foro provincial para tratar el tema de la agroecología. Uno de los organizadores fue el Municipio de Patate. Además la fundación Swissaid participó con consultores para la capacitación de los participantes.
La idea del conversatorio fue definir los ejes para que el Cabildo patateño o el Consejo Provincial trabajen en una ordenanza con la que se pueda declarar territorio agroecológico a Tungurahua para impulsar esta tendencia.
Medardo Chiliquinga, alcalde de Patate, considera que solamente Pichincha tiene esta nominación. “Nuestra meta es que los más de 6 000 agricultores que están en este proceso puedan recibir mayor capacitación y recursos”.
La producción actual
La Pacat, según su Presidente, abarca el 60% de la producción total de la provincia. Hay otras organizaciones que trabajan en Píllaro y Baños.
En Tungurahua hay una certificadora que está liderada por la Universidad Técnica de Ambato. La empresa tiene la misión de legitimar que la producción sea limpia.
La fundación Swissaid y el Municipio de Patate preparan el primer concurso nacional de gastronomía con productos agroecológicos. Será el 28 de julio en Patate.