El Hospital Municipal Bicentenario registra 61 hospitalizados en cuidados intermedios y este viernes 26 de marzo de 2021 pasaron por el área de triaje 161 pacientes con sospecha de coronavirus. Foto. Enrique Pesantes / EL COMERCIO
El hospital Luis Vernaza, de la Junta de Beneficencia de Guayaquil, tiene planeado sumar 20 nuevas camas a su unidad de cuidados intensivos (UCI) para casos de covid-19. Por ahora funcionan 29 camas, pero todas están copadas y hay pacientes en espera.
Este viernes 16 de marzo de 2021, Telmo Fernández, jefe encargado de terapia intensiva, explica que tienen otras 15 camas adecuadas con ventiladores mecánicos en el área de Emergencia, con personas en estado crítico que aguardan su traspaso a UCI.
“Es una mezcla de varios factores: falta de cuidado, nuevas variantes, tratamientos inadecuados en casa, todo se relaciona”, explica al referirse a las razones del acelerado aumento de contagios en Guayaquil en las últimas dos semanas.
El cantón experimenta un repunte de casos y de la moralidad por el virus SARS-CoV-2, que fue alertado por el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal el pasado lunes. Las salas UCI funcionan al 100% de su capacidad y las de hospitalización superan el 70%.
El Hospital Bicentenario, del Municipio de Guayaquil, es un centro exclusivo para casos covid-19. Su sala de cuidados intermedios registra 61 hospitalizados y este viernes 26 de marzo pasaron por el área de triaje 161 pacientes con sospecha de coronavirus. Esta casa de salud ha activado su plan de contingencia, que permitirá habilitar un total de 200 camas.
El hospital Teodoro Maldonado Carbo, del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), no es un centro centinela para covid-19. Pero debido a la elevada demanda, 42 de sus 71 camas UCI han sido destinadas para atender casos de coronavirus. Todas están ocupadas.
Su gerente general, Danilo Calderón, señala que han implementado estrategias para mantener, por ejemplo, los stocks de fármacos sedantes. Estos anestésicos son esenciales para la atención de pacientes en ventilación mecánica.
“En el mundo la producción de estos fármacos ha disminuido y su consumo ha aumentado. Esto afecta a todos los hospitales, a escala global. Nosotros tenemos midazolam, propofol, rocuronio, fentanilo… Y los alternamos con diazepam, morfina y algún otro sedante que nos ayude a que no rompamos stock”, indica Calderón.
Estos últimos se aplican en medio del tratamiento, cuando se requiere mantener al paciente sedado. Los primeros se usan en la fase inicial de inducción a coma y previo a despertarlos. Su demanda es alta ya que el promedio de estancia en UCI varía de 18 a 21 días.
El perfil de los pacientes ha cambiado. Ya no solo hay casos críticos entre adultos mayores, sino también personas de 45 años en adelante.
El incremento de contagios se relaciona además con un aumento de los decesos por el virus, que ha reactivado los protocolos de bioseguridad en los cuatro grandes grupos de cementerios locales.
Ayer se reportaron 70 inhumaciones en Guayaquil. Es la cifra más alta desde el 5 de mayo de 2020, cuando se estabilizó la empinada curva de muertes inusuales en el cantón tras el arranque de la pandemia en el país.
La Junta de Beneficencia de Guayaquil reportó el pasado martes 23 entierros, un 40% por covid-19. Mientras que Parque de la Paz registra más de 250 inhumacionesen lo que va del mes.
Este viernes, el Colegio de Médicos del Guayas insistió en que las autoridades locales y nacionales deben aplicar medidas más estrictas para contener una nueva ola. Su propuesta incluye la suspensión del feriado de Semana Santa y mantenerlo solo como días de descanso, restringir el acceso a playas y sitios turísticos, y aplicar una cuarentena con toque de queda durante 15 días.