En la Catedral de la Inmaculada Concepción de Cuenca se recordó este 7 de febrero del 2018, el primer aniversario de la muerte de monseñor Luis Alberto Luna Tobar. Foto: Lineida Castillo / EL COMERCIO
Con una solemne eucaristía en la Catedral de la Inmaculada Concepción de Cuenca, en el sur del Ecuador, este miércoles 7 de febrero del 2018, la Arquidiócesis recordó el primer aniversario de la muerte de monseñor Luis Alberto Luna Tobar.
La misa la ofreció monseñor Marcos Pérez, y participaron más de 60 sacerdotes de diferentes parroquias eclesiásticas, familiares, grupos de oración y cuencanos en general. Monseñor Luna Tobar falleció en Quito, a los 93 años de edad, tras un progresivo deterioro de su salud.
Padecía de insuficiencia cardíaca, hipertensión arterial, demencia senil y su cuadro empeoró tras una neumonía que le atacó el 17 de diciembre del 2016 y que fue apagando progresivamente su vida.
En la misa participaron más de 60 sacerdotes de diferentes parroquias eclesiásticas, familiares, grupos de oración y cuencanos en general. Foto: Lineida Castillo / EL COMERCIO
Tras su muerte (7 de febrero del 2017) cientos de católicos, familiares, allegados y amigos lo despidieron en diferentes actos fúnebres en Quito, donde permaneció los últimos siete años de su vida y su ciudad natal Cuenca.
Como fue su voluntad en vida, el prelado cuencano fue sepultado en la cripta de la Catedral de Cuenca con la frase en la lápida “Aquí está el que fue”. Durante la misa, monseñor Pérez, recordó varios pasajes de la vida de Monseñor Luna.
Monseñor Pérez destacó que Luna Tobar “fue un religioso de palabras sabias y sencillas, que antes de compartir la palabra con los fieles, escuchaba al Dios vivo. Ese ejemplo, debemos seguir todos los que estamos aquí”.
Al término de la eucaristía, pasada las 10:00, estuvo previsto que se reúnan los sacerdotes y visiten la cripta donde reposan sus restos.