Redacción Esmeraldas
La imagen del río Teaone, en el sur de la ciudad de Esmeraldas, cambió. Ya no se ve a los niños jugando en las aguas, mientras las mujeres lavaban la ropa. Desde el lunes último, cuando apareció una mancha de aceite frente al sector donde existen 50 casas, los vecinos no se acercan al afluente.
“El agua está contaminada y puede causar enfermedades”, advierte Dorosi Castillo. El ama de casa, de 55 años, prohibió a su nieta Carolina bañarse en el Teaone. Algo contrariada, la niña, de 9 años, obedeció. La pequeña se refrescaba ahí, junto con sus amigas, luego de las clases.
Los únicos que permanecían ayer en el río eran obreros de la empresa Termoesmeraldas. Ellos reparaban un canal de descarga de residuos líquidos que la generadora tiene frente al Teaone. Dos días antes, en este lugar y 500 metros más arriba, en una tubería de descarga de la refinería, se instalaron barreras absorbentes, con el fin de recoger el contaminante.
A pocos metros de la Termoesmeraldas, una cuadrilla de vecinos de la Cooperativa de Vivienda río Teaone cortaban los matorrales de las orillas.
Mientras tanto, Dorosi Castillo comentaba con su vecina Grace Arana, que a los cortes del servicio de agua se sumó la contaminación del río. “Ya no puedo ni lavar la vajilla. Antes, cuando no había agua, bajábamos al río. Pero ahora el líquido no sirve”.
Arana, gerente de la urbanización, aseguraba que aún no se sabe quién o quiénes son los responsables de la afectación.
En esa tarea trabajan los técnicos de la Dirección Provincial del Ministerio del Ambiente. Según Guillermo Oleas, director encargado, todos los días se están tomando muestras del agua del río, las mismas que son remitidas a un laboratorio.
La noticia sobre la polución en el río Teaone llegó a la ministra del Ambiente, Marcela Aguiñaga. La Secretaria de Estado ordenó una investigación profunda, toda vez que este afluente es parte de un proyecto piloto de recuperación, junto con el río Esmeraldas. El plan es financiado por el Ministerio del Ambiente.
Aunque los dirigentes de la Cooperativa río Teaone acusan a la Refinería de Esmeraldas de ser la causante de la contaminación, los técnicos prefieren seguir investigando antes de pronunciarse. El superintendente de la Refinería, Guillermo Estupiñán, quien viajó a Quito, dijo no conocer nada.
En medio del problema están 750 familias que habitan frente al río y que utilizan el agua.
Las indagaciones
Según los vecinos, en la parte superior del río, en donde están ubicados los tubos de desfogue de Petroecuador, se han formado pequeños charcos de aceite que bajan solamente cuando hace mucho sol o cuando llueve.
Ayer, precisamente, se movilizó hasta la zona, una delegación de especialistas de la Subsecretaría de Calidad Ambiental. El propósito es recabar datos del derrame y luego elaborarán un informe diagnosticando la zona afectada.