La temporada de verano es la época propicia para disfrutar de los balnearios de agua dulce del cantón Esmeraldas, ubicados en la zona central de la ‘provincia verde’.
Las tibias aguas del afluente son las preferidas por cientos de esmeraldeños que han encontrado en los balnearios de Vuelta Larga, Tabiazo y Carlos Concha, un pretexto para pasarla en familias, los fines de semana.
Estos sitios están ubicados en el cantón Esmeraldas, a media hora del centro de la ciudad. El primero de ellos es Vuelta Larga, donde se ha construido un parque para disfrutar del río, pero además hay tres complejos turísticos con piscinas y grandes toboganes.
Ahí también se han instalado pequeños negocios de comidas típicas de la zona, como el caldo de gallina criolla y tortillas de choclo y plátano.
El segundo es Tabiazo, sitio en que se registra la mayor concurrencia de turistas los fines de semana. La Junta Parroquial ha organizado a los comerciantes apostados a 20 metros del río.
Los pequeños microempresarios construyeron bohíos para acoger al turista local y nacional. Junto al afluente se disfruta del encoca’o de camarón de río, encoca’o de gallina ahumada y pescado de río como la sabaleta y mojarras.
El turista puede hacer una siesta acostado en una de las hamacas. Un poco más adelante, en la misma parroquia, en el sector de Tanate, se ha establecido una ruta para los amantes del turismo ecológico y de aventura.
A solo 35 minutos de camino se encuentra la cascada de Partidero. El agua es tan fría y cristalina, que provoca permanecer sumergido por un rato. En Taquísquele, en la misma ruta, se observa la cascada conocida como Quiño de Agua.
Se la conoce así por el rose sonoro del agua con la rocas. “Escuchar el sonido del agua produce relajamiento”, señala Marian Angulo, una de las turistas.
Entre las dos cascadas se puede caminar por 20 senderos naturales observando árboles frutales y árboles maderables, en medio de espesa montaña.
Los cinco guías nativos de la zona llevan a los turistas para que conozcan los lugares en los que se siente un clima agradable por la sombra de los árboles.
El presidente de la Junta Parroquial de Tabiazo, Wilson Loor, dice que están empeñados en promocionar estos lugares turísticos para que los amantes de la naturaleza recorran las cascadas y los 20 senderos, pero también quienes gustan del deporte de aventura.
Por eso en el recinto Tacole, que es el segundo sitio con mayor concurrencia de turistas, se trabaja en el levantamiento de la información que permita elaborar un gran proyecto de corredor turístico, que involucre a las parroquias Vuelta Larga, Tabiazo y Carlos Concha.
En esta última, los turistas, además de disfrutar del río, pueden pescar camarón y sabaletas, como lo hace la comunidad de manera ancestral: usando las manos o con pequeñas trampas de madera.
El año anterior, el Ministerio de Turismo propuso una inversión de USD 2 millones para fortalecer el turismo comunitario, pero el exdirector de Turismo en Esmeraldas, Carlos Acosta, dice que los proyectos se presentaron incompletos, por eso no se hizo la inversión.
Sin embargo, Libio Vélez, exvocal de la Junta Parroquial de Carlos Concha, señaló que es necesario retomar el proyecto, porque el turismo se ha convertido en una alternativa económica para decenas de personas que usualmente solo viven de su trabajo en el campo.