Autoridades buscan que La Ronda se convierta en un sitio turístico como era antes de la emergencia sanitaria. Foto: archivo / EL COMERCIO
La recuperación comercial y económica de los restaurantes y locales artísticos de la tradicional calle La Ronda, en el Centro Histórico de Quito, es una prioridad para la administración Manuela Sáenz.
Sandy Campaña, administradora de ese sector, informó este jueves 8 de abril del 2021 que mantiene reuniones permanentes con los propietarios de los negocios para reactivarlos dentro de las normas de bioseguridad y demás disposiciones que se han establecido en medio de la emergencia sanitaria del covid-19. “Están funcionando muy pocos locales de comidas y artesanías, queremos que todos se vayan abriendo de a poco”.
En las reuniones con los propietarios de negocios de La Ronda -acotó la funcionaria- se busca que los restaurantes no pierdan su objetivo principal de vender alimentos y que no se conviertan en bares o discotecas. “Queremos que se retomen las actividades, pero dentro de lo que permite el uso de suelo con música en vivo como máximo, pero no más de eso”.
Para Campaña también es importante que los hoteles vuelvan a trabajar. Como primera parte de la intervención se realizará una campaña informativa para que la gente haga conciencia al momento de consumir los alimentos y no solicite más cervezas o jarras de canelazo luego de servirse la comida. Se espera que la campaña comience una vez que finalice el estado de excepción y las elecciones.
También se busca que se reactiven las actividades culturales y artísticas con sentido patrimonial. Asimismo que La Ronda forme parte de los Laboratorios Urbanos que impulsa la Secretaría de Territorio, Hábitat y Vivienda.
Con estos se identifican y desarrollan políticas públicas territoriales del uso del suelo, hábitat, espacio público, patrimonio edificado y vivienda, bajo los conceptos de sostenibilidad, inclusión social, calidad ambiental, universalidad y cohesión social.
Alejandro Hallo, dirigente del sector, manifestó que los vecinos y comerciantes se han unido para recuperar el legado cultural y el turismo. “Durante la pandemia nos hemos concentrado en combatir a la inseguridad porque hemos tenido problemas y generamos una brigada comunitaria con la que desplazamos el microtráfico”.
Las reuniones continuarán para definir otras estrategias y lograr que La Ronda se convierta en un sitio turístico como era antes de la emergencia sanitaria.