Un árbol permite acceder al conocimiento en lugares remotos

Mide unos tres metros de alto y tiene el tronco grueso, como de un Ceibo, pero las hojas de este árbol son parecidas a las del plátano. Foto Enrique Pesantes

Mide unos tres metros de alto y tiene el tronco grueso, como de un Ceibo, pero las hojas de este árbol son parecidas a las del plátano.

Además de dar sombra, este árbol es la puerta al conocimiento para pobladores de lugares remotos del Ecuador y del mundo.

Este árbol es el primero del proyecto ‘Smart Education Tree’, creado por investigadores y docentes de la Universidad Bolivariana del Ecuador, con sede en Durán.

En sus hojas grandes reposan paneles solares que permiten generar electricidad para el árbol y para los puertos de carga de celulares y tablets de los alumnos.

La energía mantiene en funcionamiento al ‘router’ que emite una señal para ingresar a la intranet, que está llena de cursos y conocimientos.

Un árbol inteligente

El proyecto propone llevar este árbol a sitios remotos y mientras se lo instala, capacitar a la población y dotarla de teléfonos inteligentes o tablets para que accedan a los cursos.

No hay problemas de falta de electricidad o de señal, el árbol tiene autonomía y puede alimentar con electricidad a los aparatos electrónicos.

Eso sí, sus puertos USB están regulados para evitar que alguien intente robar electricidad o conectar aparatos como ventiladores, generadores de luz o focos.

Necesita mantenimiento cada seis meses,dependiendo del lugar”, explica Dayron Rumbaut, uno de los docentes que participó en el proyecto, junto a Oscar Alejo, los dos de orígen cubano.

Gira internacional

El prototipo del árbol fue presentado en el I Foro Internacional de Inteligencia Artificial desarrollado en Egipto.

Allí fue calificado por la comunidad científica como un producto innovador por permitir el acceso y uso de entornos educativos autoguiados en completa armonía y respeto al medio ambiente. 

Rumbaut señala que al árbol pueden acceder personas desde los cinco años, sin que exista límite de edad.

“Cuando se inicia la sesión te pide los datos, al llenarlos te orienta a cursos diseñados de acuerdo a tu edad y capacidades”, explica.

El objetivo de los desarrolladores del proyecto es dar una solución para la formación integral de poblaciones rurales y amazónicas sin electricidad, ni acceso a internet. 

Con el árbol piensan que es posible alfabetizar de manera digital a su público objetivo.

“Hay un dicho que señala que para trascender en la vida hay que sembrar un árbol, escribir un libro y tener un hijo; este tiene un poquito de cada una de esas partes”, bromea Rumbaut.

Mide unos tres metros de alto y tiene el tronco grueso, como de un Ceibo, pero las hojas de este árbol son parecidas a las del plátano. Foto Enrique Pesantes
Dayron Rumbaut (i) y Oscar Alejo, creadores del ‘Smart Education Tree’. Foto Enrique Pesantes

Visita nuestros portales:

Sigue a EL COMERCIO en Google News CLIC AQUÍGoogle News


Suplementos digitales