Pakistán, AFP
Los bombardeos del ejército y los enfrentamientos con los talibanes aumentaron el domingo y el lunes en el noroeste de Pakistán, sobre todo en las zonas tribales, dejando al menos 27 insurgentes y cinco civiles muertos, de acuerdo con las autoridades locales.
La aviación paquistaní continuó bombardeando los distritos tribales de Waziristán del Norte y del Sur, bastiones del jefe talibán Baitulá Mehsud, contra el cual el ejército anuncia desde hace varias semanas una ofensiva inminente.
Estos dos distritos forman parte de las zonas tribales semiautónomas situadas en las montañas fronterizas de Afganistán.
“Por lo menos siete rebeldes murieron en los bombardeos aéreos contra su refugio en Saam, una aldea de Waziristán del Sur” , indicó a la AFP un responsable de seguridad paquistaní que pidió el anonimato.
En el vecino Waziristán del Norte, cinco guerrilleros murieron cuando helicópteros bombardearon sus escondites en la aldea de Madda Jel, en represalia a una emboscada que costó la vida a 12 soldados el domingo, declaró un responsable de seguridad en Miransha, la capital del distrito.
Durante la noche del domingo, 15 talibanes afganos y dos civiles murieron en enfrentamientos en choques entre insurgentes y habitantes de Kurram, también situada en las zonas tribales paquistaníes, según responsables locales.
Ese balance fue confirmado por funcionarios paquistaníes de la seguridad.
Por otra parte, al menos tres civiles perdieron la vida durante un tiroteo entre el ejército y los rebeldes en Kaloosha, a 17 km al oeste de Wana, la capital de Waziristán del Sur, según un responsable del gobierno local, Ghafoor Sha. Este balance fue confirmado por responsables locales de seguridad.
Ninguno de estos balances suministrados por las autoridades pudo ser verificado con una fuente independiente.