25 personas han muerto debido al incendio en California que ha devastado una amplia zona de ese estado de EE.UU. Foto: AFP
Los bomberos luchaban este domingo 11 de noviembre del 2018 contra el fuego tanto en el norte como en el sur de California, intentando a duras penas contener las llamas que hasta el momento dejan 25 muertos.
Los mayores incendios se ubican en el condado de Butte, en la Sierra Nevada al norte de Sacramento, capital de este estado de la costa oeste de Estados Unidos.
En el sur, el “Woosley Fire” afecta a los condados de Ventura -donde se ubica la ciudad de Malibú, hogar de varias estrellas de Hollywood– y de Los Ángeles.
Las autoridades anunciaron el domingo dos muertos hallados en un vehículo en un camino privado. Los bomberos que combaten este incendio se están preparando para el regreso de peligrosos vientos, que podrían propagar las llamas. Los dos fallecidos elevaron a 25 la cifra de las víctimas mortales.
En la noche del sábado, las autoridades de Butte, condado donde se encuentra la localidad de Paradise, la más afectada por las llamas, habían reportado el hallazgo de 14 cuerpos, que se sumaron a la cifra previa de nueve.
Paraíso perdido
Hasta el momento, 19 de las muertes reportadas se produjeron en Paradise, donde se incendiaron más de 6 700 edificaciones, en su mayoría residencias.
Tras el paso de las llamas, las escenas eran desoladoras. Autos y casas quedaron reducidos a carcasas y escombros humeantes. Las calles quedaron sepultadas en el gris de las cenizas.
Los residentes afectados han publicado imágenes de las llamas en redes sociales en donde se observa el fuego que se propaga cerca a los caminos, por donde evacuaron las personas. También la NASA expuso una imagen de cómo se mira el incendio desde el espacio.
Gracias a la orden de evacuación de 52 000 personas en el área, la mayoría de los habitantes logró huir del peligro a tiempo.
El gobernador electo Gavin Newson declaró el estado de emergencia para brindar asistencia a las zonas más afectadas.
El incendio, bautizado “Camp Fire”, iniciado el jueves y el más destructivo de que se tenga registro en el estado, arrasó 40 500 hectáreas hasta la mañana del sábado, en tanto estaba contenido en apenas un 20%, informó el Departamento de Bomberos de California (Cal Fire), que estimó que se necesitarán tres semanas para controlar totalmente el avance de las llamas.
En efecto, se esperan vientos entre 30 y 40 km por hora hasta el martes 13 de noviembre en toda la región, lo suficientemente fuertes como para propagar las llamas en direcciones inesperadas, señalaron las autoridades.
Los Bomberos estiman que el incendio de California se prolongue por otros días más. Foto: AFP
Unos 3 200 bomberos trabajan en la contención del fuego, y tres de ellos resultaron heridos.
Pese a que aún no se ha establecido oficialmente la causa del incendio, los responsables del suministro eléctrico local informaron a las autoridades estatales que se produjo un corte de luz cerca del lugar donde se originó el fuego, informó el diario local Sacramento Bee.
Críticas de Trump
El presidente Donald Trump, que se encuentra en Francia para conmemorar el fin de la Primera Guerra Mundial, acusó a las autoridades locales de una mala gestión forestal que propicia los incendios.
“No hay motivo para estos incendios masivos y mortales en California, excepto que la gestión forestal es muy mala”, escribió en Twitter el sábado.
“Cada año se otorgan miles de millones de dólares, con tantas vidas perdidas, todo por el pésimo manejo forestal. Pongan remedio a eso o no habrá más dinero federal”, amenazó.
Brian Rice, titular de la entidad Bomberos Profesionales de California, calificó esos comentarios de “desinformados, inoportunos y humillantes para aquellos que están sufriendo así como para los hombres y mujeres que están en las líneas” de combate al fuego.
Agregó que las afirmaciones del Mandatario sobre una mala gestión forestal “son peligrosamente erróneas”.
En un tuit posterior, Trump mostró mayor simpatía: “Nuestros corazones están con aquellos que luchan contra el fuego” así como con los evacuados y las familias de los muertos. “Dios los bendiga a todos”.
Pero este domingo volvió a la carga: “Con un manejo forestal adecuado, podemos detener la devastación constante en el estado de California. ¡Entérense!”, escribió.