Redacción Guayaquil
Una reforma aduanera busca cambiar las reglas del juego en la actividad del comercio exterior. Sanciones, reducción de gastos, multas, clausuras, prisión, eliminación del directorio y un nuevo nombre a la entidad: Aduana del Ecuador son las propuestas que tendrá el proyecto de ley.
El documento fue presentado por la ministra coordinadora de la Producción, Nathalie Cely, y el gerente de la Corporación Aduanera del Ecuador (CAE), Santiago León. El evento se realizó en el auditorio del Ministerio del Litoral, donde participaron más de 150 personas entre agentes afianzados, importadores y empresarios.
Según Cely, la idea es sociabilizar el debate de la nueva ley para que se beneficien todos los usuarios y puedan exponer sus recomendaciones y sugerencias antes de ir a la Asamblea. “El sistema premia a los que cumplen con las leyes y es duro con los que no la cumplen. Las penas son más duras pero son más claras”.
Entre las propuestas también se encuentra cobrar los impuestos sobre el valor de las mercaderías, flete y costo del transporte. Antes se incluía el seguro, pero ahora se lo elimina. León explica que esa medida le ahorrará a los importadores cerca de USD 6,9 millones anuales.
También incluye rapidez en los trámites, facilidad para que las recaudaciones se hagan en cualquier entidad financiera que tenga convenio y sanciones para los que no tributen mercaderías valoradas hasta 150 salarios. Las multas van desde 10 veces el valor de la mercadería hasta cinco años de prisión.
Los agentes afianzados de Aduana apoyan el proyecto pero critican las multas y sanciones. Juan José Gaviria, presidente de la Federación Ecuatoriana de Agentes de Aduanas, dijo que las multas son exageradas y que muchas decisiones de los aduaneros son discrecionales. “Ahora que tenemos el proyecto de Ley lo vamos a analizar y hacer las observaciones necesarias”.