Buenos Aires, Ansa
Las Abuelas de Plaza de Mayo anunciaron hoy que identificaron al nieto 101, entre los niños apropiados por los militares y sus cómplices durante la dictadura (1976-1983) .
El nieto recuperado, hoy de 32 años, fue identificado como Francisco Madariaga Quintela, hijo de Silvia Mónica Quintela y Abel Pedro Madariaga, ambos militantes de la organización Montoneros.
Silvia Quintela era médica y atendía a los pobres en una pequeña clínica en la localidad de Beccar, cerca del barrio marginado de La Cava, uno de las más grandes de Argentina, distante 30 kilómetros al norte de Buenos Aires.
La joven fue secuestrada en la mañana del 17 de enero de 1977 cuando se dirigía a la estación de trenes de Florida, zona norte del Gran Buenos Aires. De acuerdo a relatos de una compañera, Silvia fue rodeada por militares del Primer Cuerpo de Ejército, vestidos de civiles y que se desplazaban en los temidos Ford Falcon que en esos años utilizaban las fuerzas represivas.
Esa misma tarde, siete hombres allanaron la casa de la madre de Silvia, Luisa Quintela, revisaron todo y le dijeron que su hija había sido “detenida”. Silvia tenía cuatro meses de embarazo cuando fue secuestrada y sobrevivientes del centro clandestino de detención “El Campito” que funcionaba en la guarnición militar de Campo de Mayo, confirmaron que la joven embarazada permaneció detenida allí hasta el momento del parto, a fines de julio de 1977, cuando fue trasladada al Hospital Militar de Campo de Mayo.
En la maternidad clandestina alumbró por cesárea un varón al que llamó Francisco y que le fue robado después del parto. Su compañero Abel sobrevivió a la represión y partió al exilio hasta 1983, cuando regresó al país, con el retorno de la democracia.
Desde entonces se vinculó a las Abuelas de Plaza de Mayo en la búsqueda de su hijo, con quien finalmente se reencontró el viernes pasado, informó la organización. Abuelas de Plaza de Mayo convocó para mañana a una conferencia de prensa para brindar más detalles del hallazgo.