Buena parte de la fauna izquierdista, anarquista y masónica de Quito nos dimos cita en la Flacso a decirle un hasta luego al viejo amigo Alexei Páez.
Sin proponernos algunos grupos hicimos lo que a él más le gustaba: discutir de política. Alexei convirtió a su velatorio en un gran foro donde el izquierdismo a favor o contra el Gobierno conversó de manera civilizada.
Unos hablamos de futurología: “¿Correa, gana o no las elecciones del 2013?”. Alejo fue contundente: “Correa tiene todo a su favor: el alto precio del petróleo, los subsidios, obra pública (carreteras), el aparato estatal, el Consejo Electoral, TV y radios “publicas”, años de presencia diaria en los medios, el apoyo de las masas y, la ausencia de una oposición que le haga calor”. Conclusión: Ya nada se puede hacer. Hay Correa para rato. “Siendo así” -con sorna- dijo a Jorge (uno de los más altos líderes de las de izquierdas opositoras) “no gastes plata ni energía en vano… Correa, gana!”.
Por supuesto, esta afirmación no gustó a Jorge, quien haciendo malabares analíticos y aritméticos argumentó la posibilidad de que Gustavo Larrea o Alberto Acosta tenían mucho chance de disputar la presidencia al líder de Alianza País AP.
Entre una y otra postura surgieron otras. La de José, que reconociendo la gran ventaja de Correa, puso en duda la facilidad de su ganancia: “El voto de las ‘masas’ ha sido y es inestable. La imagen de Correa se desmorona en la clase media profesional, burocracia, docentes, indígenas y otros segmentos del pueblo.
El permanente tono confrontacional, la duda ética sobre el manejo de los recursos públicos, los juicios a los periodistas, los pedidos de millonarias indemnizaciones y la criminalización de la lucha social, disgusta y atemoriza a más amplios sectores …Mucha gente no solo está harta de las cadenas nacionales y de la prepotencia, sino que ve en el Gobierno un eventual peligro totalitario al que hay que detener”.
Emilio, otro de los tertuliantes también argumentó: “El 7M (7 mayo, último referendo) demostró que la mitad de ecuatorianos no está con el Gobierno”, “En Quito y Sierra central crece un anticorreísmo duro”.
“El descontento contra el Alcalde de Cuenca se trasladará al Gobierno (lo mismo sucederá con otros gobiernos locales)” … “Si arranca la explotación minera y del ITT, las provincias amazónicas, las australes, las serranas de composición indígena y la juventud votarán en contra”. “Un candidato o candidata con un programa progresista de democracia radical, que unifique al centro y a la izquierda, dotado de un talante sereno, tolerante, respetuoso (en contraste al candidato oficial), ganaría las elecciones en segunda vuelta”.
Conclusión: “No todo está dicho todavía. Correa podría perder la presidencia… y el Parlamento, seguro”. Alejo frunció el entrecejo. Alexei, no sé.