Cómo cubrir la equiparación salarial de los docentes que consta en la Ley Orgánica de Educación Intercultural (LOEI) es un desafío que ahora tiene el Gobierno.
Para el ex ministro de Finanzas, Fausto Ortiz, esta disposición no cuenta con financiamiento. Además, se ha planteado en un escenario con un déficit presupuestario, considerando que el año pasado el hueco fiscal fue de USD 2 916 millones. Es decir, el gasto público requiere de mayores ingresos para acortar esta brecha.
El Gobierno señaló ayer que evalúa cómo enfrentar los USD 4 000 millones, que significa el incremento del gasto no financiado.
No obstante, la Comisión de Educación de la Asamblea, donde se analizaron los puntos en controversia, estimó que el monto requerido es menor.
El asambleísta e integrante de la comisión, Darwin Pereira de Pachakutik (PK), explicó que la propuesta cuenta con análisis económicos, en los que intervinieron economistas y tributaristas.
Para Pereira era importante cumplir con este requerimiento de los docentes, para brindarles condiciones salariales justas, sin afectar el presupuesto del Estado.
Los gremios de maestros del Ecuador han estado al pendiente de las acciones que se realicen en cuanto a los articulados pendientes de aprobación de la LOEI. Isabel Vargas, presidenta de la Unión Nacional de Educadores (UNE), afirmó que el magisterio desde hace algunos años ha estado por debajo del nivel salarial, pese al nivel profesional.
Según la dirigente, los maestros tienen un sueldo que apenas cubre la canasta básica y requieren de ingresos para invertir en capacitaciones y recursos para su trabajo. A raíz de la pandemia, muchos tuvieron que destinar su propio dinero para el equipamiento y tecnología para las clases virtuales, comentó.
Los docentes y asambleístas que apoyaron la equiparación salarial afirmaron que los ingresos adicionales por el incremento del precio del petróleo y los que ya se están generando por la recaudación tributaria de la Ley para Desarrollo Económico y Sostenibilidad Fiscal pueden ayudar al financiamiento de estas reformas.
El Gobierno ha señalado que en este año ingresarán unos USD 950 millones por la reforma y USD 48 millones por cada dólar que aumente el precio del barril de petróleo.
Estos recursos no serán excedentes, sino que ayudarán a cubrir el déficit fiscal y reducir las necesidades de financiamiento que tiene el país que es de unos USD 9 000 millones y hasta fin de año puede llegar a los USD 12 000 millones, señaló Jaime Carrera, secretario del Observatorio de la Política Fiscal.
Añadió que pretender financiar gastos permanentes, en este caso el de salarios, con gastos no permanentes, que vendrían a ser los del petróleo, no es viable. “No hay recursos ni para mantener el nivel de gasto actual”, aseguró.
Con las reformas planteadas se iría en contra de equilibrar el presupuesto, a través de la reducción del gasto público, dijo el experto.