Las empresas del país mejoran sus expectativas económicas para el próximo año, según los resultados de la Encuesta Barómetro de Empresas realizada por la firma Deloitte.
“La visión hacia adelante es, en general, un poco menos pesimista que los resultados obtenidos en septiembre del 2011. En esa fecha, un 68,3% de los encuestados consideraba que la situación económica empeoraría, pero ahora eso se redujo al 32,8%”, aseguró el socio de la firma, Joseph Soto.
Las expectativas optimistas son aún más grandes en el campo microeconómico, es decir, de sus proyecciones de negocio. Así, un 54,2% de empresarios cree que la situación de la compañía (en términos productivos, de empleo y de ventas) mejorará y solamente un 9,2% cree que será peor.
Para Soto, la preocupación privada radica principalmente en el hecho de que el país no se abra a nuevos mercados y sobre la presión tributaria cada vez mayor. Mientras que por el otro lado, lucen confiados de que el consumo se mantendrá, lo que se reflejará en mayor producción, mayores ventas y mayor rentabilidad.
Esta perspectiva optimista coincide con la mejora de la calificación de la deuda soberana a largo plazo de Ecuador. La agencia calificadora Standard and Poor’s (S&P) subió la nota de “B-” a “B”.
Además, la firma mejoró también la nota a corto plazo de la deuda ecuatoriana, que pasó de “C” a “B” , según un comunicado difundido en Nueva York.
La decisión de la agencia de calificación financiera respondió a las perspectivas mejoradas de crecimiento y la disposición a pagar la deuda por parte del actual Gobierno de Ecuador.
“El alza en la calificación refleja la mejora percibida en la disposición del Gobierno, así como en su capacidad para pagar su deuda gracias a las opciones financieras mejoradas, una mayor producción petrolera y perspectivas de crecimiento económico”.
Esta percepción de una mayor disposición de Ecuador a pagar su deuda se ve reflejada en los datos de los recientes pagos de intereses de sus bonos con vencimiento 2015, así como pagos de deudas bilaterales y multilaterales , agregó la calificadora.
“Más aún, las mejores relaciones con inversores del sector privado, especialmente en ejes claves del petróleo y la minería, son un elemento importante en nuestra evaluación de una posición más pragmática del Gobierno en materia de política económica ” .
Esto sin embargo contrasta con las expectativas de los empresarios nacionales en materia de Inversión Extranjera Directa. Según el estudio de Deloitte, el 53,8% considera que la captación de ISD será peor en el próximo año.
Finalmente, S&Pseñala que un mayor financiamiento de China y un incremento de las ventas petroleras han permitido una mayor inversión del sector público. Pero advirtió que “la historia reciente del incumplimiento de Ecuador y la inconsistencia de sus políticas económicas siguen siendo desventajas para el crédito”.
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