Con un indicador del 8,3% Quito registró hasta junio pasado la tasa más alta de desempleo en el país, incluso por encima de la media nacional que es de 4,4%. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Hombres de diferentes sitios del Ecuador se agolparon la mañana de hoy, 20 de septiembre del 2019, en las afueras del campamento de la constructora Herdoiza Crespo, ubicada en la parroquia de Pifo, oriente de Quito.
Ellos aplican para un puesto de trabajo luego de que se abriera una convocatoria por Internet. “Vengo desde la parroquia Tundayme en la provincia de Zamora Chinchipe, llevo tres años desempleado”, manifestó el chofer Luis Vega.
Él viajó dos días desde su tierra para llegar a Quito. “He sobrevivido trabajando en el campo o pidiendo caridad. El señor presidente (Lenín Moreno) dice que da empleo y está mal”.
El hombre tiene dos hijos que estudian en el colegio. “Los he mantenido buscando lo que haya o vendiendo cualquier cosa en Quito (…) Le suplico al Gobierno que nos ayude”.
La noticia de que miles de personas aplicaron para un puesto de trabajo en la constructora se viralizó en las redes sociales en el transcurso de esta semana.
En diferentes cuentas de Twitter y Facebook se publicaron las fotografías de la gente haciendo fila para dejar su hoja de vida. En las imágenes se observa a miles de obreros bajo el sol de la mañana esperando por su turno para ingresar. Unos llevan maletas, otros portan carpetas con sus hojas de vida.
En otras fotografías se observa que la fila de aspirantes a un trabajo incluso llega hasta el intercambiador de Pifo y baja a los restaurantes de comidas típicas localizados en la vía Interoceánica, que conecta el redondel de Puembo con Pifo. Visten ropa abrigada y están parados sobre la acera.
Con un indicador del 8,3% Quito registró hasta junio pasado la tasa más alta de desempleo en el país, incluso por encima de la media nacional que es de 4,4%.
La mañana de hoy, viernes 20 de septiembre del 2019, decenas de personas hacían fila en los exteriores de la empresa, al igual que en días anteriores. Este Diario entrevistó a los obreros que buscan un empleo. David Paulián es un chofer que no consigue empleo desde hace un año.
“El miércoles hubo mucha gente. Antes laboré en el Cuerpo de Ingenieros del Ejército, también en el Metro, pero todo ya se acabó”, manifestó. “Salimos con liquidación, pero no hemos conseguido nada estable”.
Nelson Medina viajó desde Manabí y cuenta que no tiene un empleo fijo desde hace cinco años. Este ayudante de transporte ha sobrevivido de ‘cachuelos’ como albañil y taxista. “De las autoridades del Gobierno no espero nada porque no ha hecho algo por solucionar el desempleo”.
Mauro Tercero llegó desde Salcedo en Cotopaxi. Contó que resultó preseleccionado para una plaza de trabajo en la constructora. Para sobrevivir, laboró como taxista informal y reemplazante de choferes en diferentes cooperativas de transporte.