El gerente de la Empresa Pública Petroecuador, Byron Ojeda, fue enfático. Él piensa que revisar el modo de cálculo de los precios a los que se entrega el crudo ecuatoriano es una cuestión de soberanía.Con la nueva fórmula de cálculo, el país se podría beneficiar en USD 265 millones. Vale la pena. Para ello se enviaron ya facturas con el nuevo componente a empresas de China y de Tailandia, que hicieron compras anticipadas.
La idea es renegociar esas condiciones, buscar distintos plazos y reconsiderar los volúmenes. Las empresas no aceptaron la reformulación y se abrirá una etapa de negociaciones.
Un total 530 millones de barriles están ofrecidos hasta el 2024. Con estas ventas anticipadas durante los mandatos de Rafael Correa, se nutrió la caja fiscal pero se comprometieron recursos para muchos años.
El funcionario explicó que el cálculo de precio se hacía en relación con el índice internacional de Argus, que contemplaba el precio del crudo West Texas Intermediate (WTI), al que siempre se consideró el marcador; de
allí se descontaba un castigo por la menor calidad de nuestro petróleo y se agregaba un premio.
De ahora en adelante, se tomará como referencia el índice de Platts. El Gerente de Petroecuador, que hizo este anuncio con determinación, ha abierto al país la expectativa de obtener medio dólar adicional por cada barril de petróleo, lo cual no es menor para las urgencias fiscales.