Concha Buika Nació en Palma de Mallorca (España), en 1972. A lo largo de su carrera ha producido 11 discos. Su última producción se titula ‘Para mí’. Foto: Cortesía
La carrera musical de la artista española, de origen guineano, Concha Buika, ha mutado con el tiempo. Empezó con el jazz y el rock y ha transitado por el flamenco, el afrobeat, la rumba y el góspel. El sábado regresa a Quito, después de cuatro años, para presentarse en el Teatro Nacional Sucre y compartir con su ‘tribu’ temas de sus últimos discos entre ellos ‘Vivir sin miedo’, una producción en la que incluyó temas en inglés.
¿Cuáles son las novedades que habrá en su nueva presentación en Ecuador?
Lo que te voy a contar es una primicia. Regreso a Ecuador a presentar mi nuevo trabajo que se titula ‘Para mí’. Es un EP con cinco canciones muy crudas y muy de alma. Es la producción que más he disfrutado a lo largo de mi carrera. Todo ha sido como un puñal de seda: maravilloso pero nada difícil.
¿Qué historias se cuentan en esta nueva producción?
El título de este disco es mágico porque cada vez que lo pronuncias te estás regalando algo a ti. Fue pensado como un obsequio para uno mismo. Esas dos palabras encierran tanto porque nos pasamos la vida compartiendo, y eso es perfecto y maravilloso, pero pienso que cuando haces cosas para ti se abre un nuevo universo de posibilidades.
¿Qué sonidos nuevos se incorporaron en el nuevo disco?
En ‘Para mí’ vas a escuchar los sonidos de una guitarra española clásica, de un bajo mágico, de unos cajones flamencos maravillosos y de un trombón que parece que viene del cielo.
Ha dicho que no cree mucho en los discos
Sacar un disco cada año me parece una barbaridad porque el artista está sometido a una presión tremenda. En la actualidad hay pocas personas que se sientan a escuchar un disco. Creo que ahora los discos tienen que ir ligados a la naturaleza de cada artista. Si te apetece producir un disco de tres temas o de uno tienes que hacerlo.
Usted ha sido muy crítica respecto a la violencia contra la mujer, ¿siente que tiene una responsabilidad como artista de hablar de este tema?
Mi responsabilidad como artista es crear armas de construcción masiva y de que las personas sepan que soy una persona fuerte a la que nadie puede tumbar ni de cabeza, ni de corazón, ni de alma. No hay necesidad de que nadie te tenga que obligar a vivir de una manera que no quieres. Dios no lo manda ni la naturaleza tampoco, eso se lo inventó alguien. El maltrato empieza por uno mismo. Ya sea maltrato de hombres a mujeres, de hombres a otros hombres o de mujeres a niños.
¿Por qué decidió que la gira de este año lleve el nombre de su nuevo disco?
Hay un tema en el disco que también se llama Para mí que está dedicado a las personas que se van físicamente pero que se quedan con nosotros de alguna forma. Las personas cuando se marchan se nos quedan dentro. Es un tema dedicado a la gente que nos acompaña en nuestras luchas diarias.
¿Qué recuerda de su anterior visita al país?
Lo que más recuerdo es que el público quiteño es un ‘tribu’ muy caliente. También recuerdo que me comí un ceviche que no olvidé en meses. Nunca había probado una cosa tan deliciosa.
¿Tiene preparado un ‘playlist’ para el concierto en el Teatro Sucre?
La verdad es que a veces hago listas y otras veces no. La última vez que estuve en Ecuador recuerdo que me dejé guiar por el público, que al final es el director de orquesta de un concierto. Me gustó mucho el pueblo ecuatoriano porque tiene una historia de mucha lucha y de paciencia muy fuerte y eso lo sentí en el ambiente de la sala.