Todo sucedió por pura casualidad, hace menos de 10 años. Un día de esos en los que uno busca leer algo para no aburrirse, se encontró con el libro ‘La medición del mundo’, de Daniel Kehlman. Página a página, la figura del explorador alemán Alexander von Humboldt, del cual destaca su “disposición de conocer más de cerca a las personas”, fue capturando su atención. Y cambió el rumbo de su historia. Desde entonces, Frank Gaudlitz, un alemán con estudios de pedagogía y fotografía, empezó una investigación que le llevó año y medio de escudriñar en libros para decidirse a recorrer, en el 2010, la ruta que aproximadamente 200 años atrás Alexander von Humboldt realizó por América Latina.
Pero, ¿qué hay de novedoso en que una vez más un alemán recorra las vías que, entre otras cosas, llevaron a Humboldt por el Camino del Inca? La respuesta es sencilla: esta vez los paisajes de los Andes no serían retratados por dibujantes; una cámara de fotos, o más bien varias de ellas, serían las encargadas de inmortalizar una ruta “no muy distinta de aquella que vio Humboldt”, según comenta Gaudlitz.
Considerado el último sabio de la cultura enciclopédica, Humboldt (1769-1859) dedicó cinco años -entre 1799 y 1804- a explorar la región comprendida entre México y el norte del Perú. En su caminar, volcanes como el Cotopaxi, al cual se refiere como “un cono perfecto cubierto por una capa blanca de nieve que brilla con el sol”, o montañas como el Chimborazo fueron destinos que formaron parte de sus viajes.
En ‘La Ruta del Sol’, una muestra que reúne 76 fotografías captadas en este viaje humboldtiano localizado específicamente en la ruta Colombia-Ecuador-Perú, y que se exhibe en el Centro de Arte Contemporáneo de Quito, el fotógrafo alemán ha centrado su atención a dos aspectos en particular: paisaje y retrato.
En paisaje, conformado por 26 fotografías, la idea de Gaudlitz es exponer imágenes que jueguen con la idea de un pasado que mantiene su huella en el presente. Es así que cada una de ellas ha sido trabajada en blanco y negro con el fin de “permitir una abstracción que ayude en la construcción de un puente entre el pasado recorrido por Humboldt y la actualidad capturada en la fotografía”, como comenta su autor.
En cuanto a retrato, Gaudlitz apuesta más por la actualidad, aunque sin darle primacía a imágenes más contemporáneas; con 50 fotografías reconstruye ambientes que parecen detenidos en el tiempo, con un aire costumbrista. Ahí está, por ejemplo, la foto del niño que juega a ser torero. Él, posando frente a la cámara, se muestra a él y a su casa hecha de paredes de adobe.
Además de exhibir un testimonio de su viaje por América del Sur, Gaudlitz también participó de la museografía de la exposición. En las salas de exhibición, concretamente los pabellones 3 y 4 del antiguo Hospital Militar, las imágenes se encuentran dispuestas sobre paredes negras, con una iluminación que tan solo proyecta un haz de luz sobre las fotografías y, además, sobre una serie de fragmentos de los ‘Diarios de mi viaje’ de Humboldt que se encuentran escritos sobre el suelo.
A las 11:00 del sábado 3 de septiembre, durante una de las dos visitas guiadas que Gaudlitz ofreció a los visitantes a la muestra, el fotógrafo alemán fue describiendo paso a paso el momento de cada imagen. En esa mañana una veintena de personas, muchas de ellas conocedoras de las técnicas fotográficas, abordaron a Gaudlitz con una serie de preguntas que iban desde ¿cuál es el pixelaje adecuado para que la foto no se distorsione en su ampliación?, hasta otras más de corte personal en las que se lo interrogaba acerca de sus emociones al conocer cada uno de los lugares recorridos (15 en Colombia, alrededor de 30 en Ecuador y casi 40 en Perú).
Entre las anécdotas más memorables de este viaje, Gaudlitz recuerda a una mujer indígena que diariamente caminaba 1 200 m de ida y vuelta desde lo alto de una montaña hasta al pueblo para visitar a su hija. “Viendo esto recordaba a Humboldt y me decía: ¡este hombre estaba loco! ¡Cómo hizo para recorrer todo el continente con un uniforme prusiano si para nosotros sigue siendo difícil inclusive la indumentaria correcta!”, concluye sorprendido.
HOJA DE VIDA
Frank Gaudlitz
Su experiencia. Nació en 1958 en un pueblo cerca de Brandenburgo. En Berlín realizó sus estudios de Pedagogía y Fotografía.
Su punto de vista. La figura de Humboldt no solo es la de un enciclopedista. Su calidad humana le permitió acercarse a la gente americana.
El proyecto
‘La Ruta del Sol’ fue patrocinado conjuntamente por la Asociación Humboldt de Ecuador y los institutos Goethe de Bogotá y Lima.
Durante los viajes, la mañana y tarde eran ocupados para las fotografías. Las noches eran ocupadas para buscar comida y refugio.
La muestra está abierta en el antiguo Hospital Militar hasta el 30 de octubre.