Desde este lunes 19 de octubre del 2015 se prevén más plantones de las trabajadoras sexuales en la Plaza Grande. Foto: Alfredo Lagla / EL COMERCIO
Las trabajadoras sexuales del Centro Histórico de Quito no quedaron conformes tras la reunión que mantuvieron con el administrador de la zona Manuela Sáenz, Jhoffre Echeverría. La posición del Municipio fue tajante: no se reabrirán los hostales clausurados este viernes 16 de octubre en donde, supuestamente, las mujeres prestaban sus servicios.
La respuesta de las trabajadoras sexuales también fue contundente: realizarán marchas para exigir su derecho a laborar. Desde este lunes se prevén plantones en la Plaza Grande, frente al Municipio de Quito. Aún no se conocen más detalles de la organización que tendrán las mujeres que laboran en el centro.
Por su parte, la Red de Trabajadoras Sexuales del Ecuador se sumará a los reclamos. Elizabeth Molina, presidenta de esta organización, comentó que la próxima semana se llamará “a una gran reunión de mujeres” para concretar acciones.
Ella rechazó “el abuso” de las autoridades e indicó que al cerrar los hostales afectan directamente el trabajo de las compañeras que buscan clientes en las calles y, luego, hacen uso de las habitaciones.
La reunión en la que participaron las autoridades y representantes de las trabajadoras sexuales duró cerca de tres horas. Ahí se expusieron puntos de vista y criterios sobre las condiciones de trabajo.
Jhofre Echeverría señaló que se continuarán con los diálogos pese a las marchas anunciadas. “Estamos analizando la inclusión de un proyecto social de salida de la actividad sexual, pero todavía no está claro”, dijo.
Esta mañana, la Intendencia de Policía cerró seis hostales ubicadas alrededor de la Plaza del Teatro, una más recibió la sanción en la tarde. Según la autoridad de control esto se dio porque ningún local cantaba con los permisos de funcionamiento.
Echeverría ratificó que las hostales no se reabrirán y añadió que los controles continuarán. Recordó que una administradora de uno de estos centros, ubicado en la calle Manabí, fue detenida por no haber acatado una primera sanción realizada meses atrás. “No contaba con licencias y tenía, anteriormente, un sello de clausura. Aquí se daba actividad sexual”.
El jueves 8 de octubre ya se dio una concentración de las trabajadoras en la Plaza Grande. Ahí acusaron a concejales de dar un tratamiento político a este tema.