Redacción Quito
La erradicación del trabajo infantil será una de las prioridades en la gestión del Patronato San José. Para Andrea Nina, presidenta de la Fundación, este es un reto que se deberá asumir con la participación de varias entidades.
3 frentes
de trabajo tiene el nuevo plan para reinsertar a los niños de la calle a las escuelas.El propósito es que los niños salgan de las calles para asistir a la escuela. Nina reconoce que es una ardua gestión, pero dijo estar segura que con la participación ciudadana el proyecto avanzará.
Adelantó que ya se empezó a trabajar en el plan que, hasta finales de este año, tendrá tres frentes. Actualmente se realizan charlas para las familias de los chicos que trabajan en las calles. “Es primordial que ellos sean los primeros en cambiar de mentalidad”.
Para ello se llegó a un acuerdo con Unicef y con el Consejo Local de la Niñez. Ellos ayudan con expertos y asesoría para el avance del plan. Nina destacó que las entidades del Estado y de las empresas privadas también participarán.
Así, la Fundación acordó la creación de un proceso de reinserción de los niños y jóvenes a los establecimientos educativos con el Ministerio de Educación.
Además, el Patronato se reunió con empresarios de La Mariscal, quienes propusieron un proyecto agrícola. En este podrán colaborar los padres de los niños que venden flores en este y otros sectores de la ciudad.
Para Margarita Velasco, directora del Observatorio de la Niñez y la Adolescencia, este programa tendrá éxito a largo plazo siempre que se realicen los debidos análisis. Según ella, en un estudio del Observatorio se cuantificó que la mayoría de personas que trabaja en las calles son preadolescentes. En algunas ocasiones –dijo- no tienen relaciones familiares y están acostumbrados a llevar ese tipo de vida.
Para Velasco, se debe evaluar cada caso por separado. “No es lo mismo reinsertar a niños con familia que tengan el deseo de cambiar, que a jóvenes huérfanos que no desean salir de las calles”.
Según Nina, también se ampliarán los servicios de las casas de la Niñez, en donde se reciben a los chicos que ya han acudido a las charlas. Mientras que el tercer frente será la difusión del proyecto mediante el certamen de Reina de Quito. Allí se socializarán los ejes del plan para adherir más voluntarios.