Los controles en el sector de la Plaza Foch se realizan desde el miércoles hasta el sábado, para evitar actividades delincuenciales. Foto: Galo Paguay/ EL COMERCIO
Son las 20:00 y unos 40 agentes de la Policía Nacional hacen formación en plena Plaza Foch. Su presencia sí le ha dado otro semblante a esta zona de la capital. Algunas prácticas que eran comunes se han eliminado y otras han disminuido. El objetivo de los operativos permanentes es volver a este sector un “emblema de la seguridad a nivel nacional”, según José Serrano, ministro del Interior.
Carlos Ortega, mayor de Policía Nacional y jefe de operaciones del circuito La Mariscal, cuenta que el operativo integral conlleva labores preventivas, investigativas y de inteligencia. Para esto laboran en conjunto con otras unidades como la Intendencia Municipal o la Policía especializada en Menores de edad (Dinapen).
Entre los hallazgos encontrados desde que empezó la intervención integral del circuito de La Mariscal, con la inauguración de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC), hace un mes, está la localización de 40 predios abandonados, que eran usados por indigentes y que daban espacio a actividades delincuenciales.
Otro punto se centra en el control de libadores en la vía pública, esto para evitar posibles grescas entre individuos en estado etílico que pueden terminar en delitos contra la vida. Así mismo se hacen operativos para garantizar el cumplimiento de las normas con relación a horarios de atención y expendio de bebidas alcohólicas en bares, discotecas y restaurantes de la zona.
También, según Ortega, se ha desplazado a las personas que cuidaban los vehículos de los visitantes del sector y que exigían pagos altos. En esta parte el oficial acepta que este tipo de delitos se han desplazado a otros sectores de la ciudad. Pero asegura que otros circuitos están empezando el mismo tipo de controles.
En cuanto al trabajo infantil, Ortega explica que los menores han dejado de ser vistos como infractores, ya que ellos robaban y expendían drogas. “De acuerdo al diagnóstico se establece que muy probablemente atrás haya una red de trata de menores“, dice el jefe de operaciones.
La Dinapen, en conjunto con los Policías del circuito, realizan operativos en las noches de los miércoles, jueves, viernes y sábado de todas las semanas.
El procedimiento es tomar a los menores y llevarlos a donde sus familias para establecer lo que hay detrás del trabajo del menor.
“Hay que coger a toda la red, porque si no suplen al menor y continúa el ciclo, los operativos son sostenidos”, sostiene Ortega.