El grupo folclórico Mashipura, del cantón Milagro, se presentará hoy en el marco del evento. Foto: Cortesía Mashipura
Confrontar la imagen del montuvio en el imaginario colectivo respecto de su evolución como individuo de la contemporaneidad. Ese es el principal interés de la programación de ‘Soy montubio’ (sic), una semana de actividades con la que estudiantes de la Universidad Católica de Guayaquil buscan acercar las expresiones montuvias a la comunidad universitaria y a la propia ciudad.
La iniciativa de los alumnos de la cátedra de Animación Cultural 2, de sexto semestre de Comunicación Social, plantea rescatar las tradiciones y costumbres del hombre de raíces campesinas, en una semana de eventos que se extenderá hasta el próximo viernes 17 de febrero de 2017.
La programación tenía previsto arrancar la tarde y noche de ayer con el foro ‘La identidad montubia (sic) en el siglo XXI, más allá del folclor’, con investigadores como Willington Paredes y Wilman Ordóñez. “Queremos reivindicar la imagen del montuvio, una cultura que consideremos está estereotipada y poner a prueba los clichés que existen sobre esta población, que también vive en la ciudad”, indicó Melissa Gavilanes, de 19 años, guayaquileña de raíces montuvias y coordinadora del evento.
La programación incluye tradición oral, bailes y gastronomía, además de juegos tradicionales y una exposición fotográfica. Hoy, a las 10:00, el evento sale de los predios de la universidad y se trasladará hasta la Casa Patrimonial Calderón, en el barrio Las Peñas, del Cerro Santa Ana.
La jornada de danza, coplas y amorfinos la protagonizará el grupo folclórico Mashipura, del cantón Milagro, con una muestra de bailes tradicionales de la Costa.
Un grupo de cinco estudiantes, de los 25 que organizan las actividades, se embarcó en la aventura de seguir a un montuvio durante todo un día, a fin de registrar su jornada de trabajo y su vida cotidiana en un video documental y en una exposición fotográfica. La muestra será inaugurada mañana, en el salón de usos múltiples de la universidad.
El jueves está prevista una sesión de trabajo didáctico con los niños que asisten al programa de animación de lectura de la Casa de la Cultura Núcleo Guayas. El viernes, en el cierre del programa, le propondrán a la comunidad universitaria participar de juegos tradicionales como el de las ollas encantadas, donde una persona con los ojos cubiertos intenta romper una olla de barro.
La clausura incluirá una muestra gastronómica denominada Montubigana, a partir de alimentos como el plátano verde, el maduro y la caña de azúcar. También habrá juegos con el vocabulario montuvio. “Hablamos el mismo idioma, pero el montuvio tiene ciertas palabras y giros, que a los citadinos nos pueden resultar difíciles de entender”, indica Gavilanes, de 19 años, cuyos tíos y abuelos aún cultivan la tierra en Yaguachi (Guayas). “Sigue siendo español, pero te toca, a partir de tus conocimientos, dilucidar el significado de las palabras”.