Fueron 10 días, 11 funciones de teatro y danza, 40 eventos, seis países, 15 escenarios y cientos de espectadores que le dieron vida a la quinta edición del Festival de Teatro Latinoamericano Sudaka 2012, que hoy llega a su fin.
La clausura es esta noche en la Escuela de Actores (6 de diciembre y Eloy Alfaro), a las 20:00. El maestro Wilson Pico será el encargado del cierre de este festival, un proyecto de Xona Bastarda, Teatro Experimental de Quito y Fundación Cultural El Retablo Teatro.
Después de un año más de Sudaka, el director de esta edición, Pablo Roldán, dijo que se llevan “un muy buen sabor de boca. Nos causó mucha impresión con respecto al público. Tuvimos dos días casi llenos en el Teatro Variedades, que para nosotros es difícil llenarlo”.
Roldán además explicó, que tuvieron problemas de logística por el cambio en el cronograma. Y es que algunos escenarios cambiaron su programación por diversas razones y por ende, la suya.
A eso se suma el hecho de que “venían grupos que querían tocar y nos insistían para hacerlo y eso modificaba la agenda. Tenemos que dejar de ser menos familiares y más técnicos”, confesó.
La misión de Sudaka ha sido, desde su primera edición, crear una plataforma sólida y consistente para las agrupaciones nacionales e internacionales que permita desarrollar al máximo las artes escénicas de manera eficaz, oportuna y sobre todo diferente.
En el cierre del festival se presentará Cactus Azul en Pintag (Colegio General), con la obra para espacios abiertos ‘Se huele a Revolución’. Y a las 16:00 en Conocoto (La Moya).
Como parte del evento clausura habrá cinco horas continuas de música en la Plaza del Teatro. Desde las 14:00 pasarán por el escenario La Chancleta, Atrovatas, Los Pergaminos de Melquiades, Areka (performance), Sonbaua y Chelo Calavera.