Es un elemental consejo a los turistas al valle de Cumbayá, que si desean visitar este paraíso, tengan en cuenta los riesgos que tiene que pasar, en el paisaje lunar. Así es, es lo que les pasa a las vías que están junto a la superviva, la Ruta Viva, lo que queda de las cuatro calles, son grandes cráteres que son unas barreras a paso de todo ser humano que se atreva a desafiarlos.