Sebastián Borja Silva
Toda empresa, independientemente de su tamaño, aporta al progreso y riqueza de un país. Emprender, arriesgar la inversión, confiar en una idea y en el entorno de la actividad, hace que se genere un círculo virtuoso que redunda en importantes beneficios para la sociedad. Por estas y otras razones, el empresario necesita ser genuinamente apoyado sin prebendas pero con garantías de estabilidad normativa, especialmente.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT), organismo tripartito de las Naciones Unidas, persigue, entre otras cosas, el diseño y ejecución de las políticas públicas tendientes a crear empresas sostenibles, esto es emprendimientos que generen valores económico, ambiental y social en un significativo período.
La necesidad de que en el Ecuador existan empresas sostenibles es fundamental para alentar el progreso integral de la sociedad. La generación de empleo, el cuidado del medioambiente y el cumplimiento irrestricto del marco normativo, hacen que el empresario y las empresas así entendidas sean un activo muy valioso que los poderes públicos y la sociedad deben fomentar y cuidar.
La Conferencia Anual de la OIT del año 2007 propuso tres estrategias básicas para la promoción de empresas sostenibles: 1. Creación de un entorno adecuado; 2. Fomento de la iniciativa empresarial y desarrollo de las empresas; y 3. Lugares de Trabajo Sostenibles y Responsables.
La creación de un ambiente de paz y seguridad, que aliente el emprendimiento, es el primer y principal eslabón de la cadena del éxito empresarial.
La estabilidad normativa, un clima de tranquilidad y seguridad política y económica, la confianza del capital nacional y extranjero y de las nuevas inversiones, el desarrollo de sociedades que fomenten el empleo y la inserción laboral de mujeres y de jóvenes, son aspectos muy importantes para promover el espíritu emprendedor en el país.
Mensajes claros y contundentes de respeto a la libertad y a la propiedad privada son componentes medulares de un adecuado entorno de desarrollo empresarial.
Hace pocos días se llevó a cabo en Quito, el XII Congreso Industrial del Ecuador. El tema y preocupación centrales de la reunión giraron alrededor de la importancia que tiene la promoción permanente de empresas sostenibles para el desarrollo y eliminación de la pobreza en el Ecuador. En ese encuentro, entre otros análisis, se hizo una profunda evaluación del ambiente actual de negocios. Los industriales formularon una serie de propuestas concretas que apuntan a eliminar las causas que impiden la mayor participación privada que requiere el Ecuador.
Esas propuestas,contribuyen al debate que necesita el país para fomentar urgentemente la creación de empresas sostenibles y respaldar la iniciativa privada, convocando al emprendimiento con garantías y sin estigmas.