Juan Orlando Hernández será presidente de Honduras. El candidato de la derecha se impuso a su contendiente Xiomara Castro, esposa del depuesto presidente Manuel Zelaya.
Después del anuncio oficial de los resultados, Libre, el partido de la candidata derrotada, calificó al resultado de fraude electoral. Si bien Castro lideraba las encuestas, el resultado anunciado por las autoridades electorales le fue adverso. Ella hizo una campaña mostrando mayor moderación que la línea radical en la que militaba su marido, quien se alineó con el presidente venezolano Hugo Chávez y otros líderes de la izquierda continental que se solidarizaron cuando un grupo de las FF.AA. irrumpió en su casa y lo sacó de su cama.
Manuel Zelaya fue defenestrado por un golpe ‘institucional’, con una decisión política del Congreso y deportado. El ex-Presidente buscaba reformar las normas pétreas de la Constitución para intentar ir a la reelección.
Juan Orlando Hernández pertenece al ala de la derecha en un Congreso que será multipartidista, por lo cual el factor de gobernabilidad será un dolor de cabeza. Honduras es el país más violento del mundo; el nuevo Presidente deberá sumar este factor a la ingobernabilidad.
La lucha contra los grupos delincuenciales juveniles organizados y al creciente influjo del narcotráfico ocuparán buena parte de la tarea del nuevo Régimen, después de sortear las denuncias de fraude electoral.