Con explicaciones técnicas sobre supuestas inconsistencias debidas a duplicaciones o multiplicaciones de firmas, el Consejo Nacional Electoral (CNE) informó que el colectivo Yasunidos alcanzaba una cifra inferior a la requerida para que se convoque a una consulta popular.
Yasunidos es un grupo que se dio a la tarea de recolectar firmas que promuevan una consulta popular para evitar que se alcance el objetivo anunciado por el Gobierno de explotar petróleo en el 1/1 000 del Parque Nacional Yasuní. Varios meses de polémicas y discursos a favor de la naturaleza propiciaron incluso la recolección de firmas en formularios parecidos de tres grupos diferentes con objetivos evidentemente distintos .
El Gobierno se opuso a la consulta de Yasunidos. El presidente Rafael Correa tachó la propuesta y aseveró que él mismo hubiese propiciado esa consulta de no mediar la politización del tema.
Hay dos datos curiosos pero relevantes. Este Gobierno promovió en la Constitución de Montecristi la participación popular hoy cuestionada. Y este mismo Gobierno gastó millonarios recursos y decenas de discursos en foros internacionales para tratar de convencer a la opinión pública mundial y nacional de lo importante de dejar intocado el Yasuní.
Pero el pragmatismo por obtener ingresos para sus proyectos y mantener un abultado Presupuesto le hicieron cambiar de opinión. Hasta tanto, y mientras no se divulguen pruebas sobre las inconsistencias, es la palabra del CNE contra la de Yasunidos.