El cambio de fecha de las elecciones 2013 permite la plena vigencia del polémico Código de la Democracia que, entre otras cosas, pone cortapisas al trabajo de la prensa para la divulgación de entrevistas a los candidatos a las distintas dignidades para el período 2013 -2017.
Las elecciones serán el 17 de febrero de 2013 para la primera vuelta presidencial y el 7 de abril para la segunda vuelta presidencial, o el ballotage si hace falta.
La fecha inicial fijada en agosto de 2011 fue el 20 de enero para la primera vuelta. El cambio se presta para la interpretación y la suspicacia.
Como la Asamblea no pudo insistir en las reformas por no contar con los votos, por el veto presidencial al Código de la Democracia se aprobaron unas normas que impiden la divulgación de entrevistas y perfiles en campaña.
El peligro está en el reglamento, que todavía no se expide, y la posibilidad de que una autoridad subjetiva y no independiente del poder dominante sea la que califique cuáles de esos trabajos periodísticos podrían incurrir en una infracción al Código.
La oposición ha denunciado que esta prohibición atentaría contra la equidad del proceso donde el Ejecutivo de turno puede correr con ventaja en el empleo del aparato burocrático, recursos y hasta la millonaria propaganda gubernamental frente a la indefensión y hasta la minimización de las ideas, propuestas y el conocimiento de los candidatos que no gocen del favor oficial.
Este riesgo puede surgir, máxime si el acceso a la publicidad y divulgación de planes y programas no se hace de modo equitativo para todos los candidatos, lo que afectaría a la plena vigencia y al ejercicio de la democracia.