Las dificultades económicas obligan al Gobierno a un nuevo recorte presupuestario. Esta vez será de USD 800 millones.
Aunque el Régimen se resista a hablar de crisis, hay hechos que configuran una compleja realidad. Las causas de la nueva situación económica se cifran en un aspecto que el país no controla: el precio internacional del petróleo, que ha mostrado los niveles más bajos en años.
Si a ello sumamos la apreciación del dólar frente al euro y las devaluaciones de monedas de los países vecinos, el mapa de las exportaciones ecuatorianas y su impacto en la balanza comercial, se modifica sensiblemente.
El nuevo recorte anunciado este miércoles se compone principalmente de gastos de inversión y de gasto corriente.
Hace un año, cuando el Presidente avizoraba la nueva realidad económica para el año 2015, advertía que en el primer rubro se centrarían los mayores recortes.
En el primer trimestre, el Gobierno cortó el Presupuesto en USD 1 400 millones. Luego reajustó las salvaguardias y sobretasas para evitar que millones de dólares se vayan por la puerta de las importaciones de modo considerable. La balanza comercial es deficitaria.
Las necesidades de financiamiento se cifraban en USD 8 807 millones.
Empréstitos y venta anticipada de crudo han antecedido a esta nueva decisión. Los expertos consideran que las condiciones del panorama internacional forzarán a revisar las expectativas de la economía, no solo para este año sino para los siguientes.